Capítulo 3

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-Criminóloga – La mujer le mostró su identificación – Elsa Arendelle, fui contratada para Guardianes.

El oficial al mando se acercó a leer la identificación mientras el otro policía le apuntaba, la miró de nuevo y después a su compañero para indicarle que bajara el arma.

-Una disculpa señorita.

-No me estorben y estarán disculpados -Elsa tomó su identificación de nuevo para regresar a analizar el cuerpo.

Pero minutos después habían llegado los encargados de recoger el cuerpo para llevarlo a investigación, fue que Elsa se había retirado de aquel lugar con esos médicos forenses.

Estando en el laboratorio en donde el cuerpo fue preparado, Elsa estaba mirando la herida con el médico a cargo.

-¡Buenas noches señores! -Los presentes se sobresaltaron con la entrada de un guardián alto, acompañado de otros dos que se quedaron en la sala de espera - ¿Qué tenemos aquí?

-¿Y tú eres? -Elsa le miró con rareza ante la actitud de este sujeto.

-¿Qué acaso el uniforme no habla por sí......

-Estoy a cargo de este crimen de parte de Guardianes ¿Quién eres? – Elsa se encaminó para mirarle de frente, aunque tenía que levantar la mirada para verle a los ojos verdes.

-Hans Sur, del departamento de criminología también -El pelirrojo sonrió de lado - ¿Eres Arendelle?

-Así es -La mujer le rodó los ojos – Elsa.

-Un gusto, Elsa – Hans le tendió su mano. Ella le miró y la estrechó sin mucho agrado- ¿Y? ¿Detalles?

-Si vas a trabajar conmigo -Elsa le habló con firmeza – ¿Quieres detalles? Obsérvalos por ti mismo si es obvio lo que sucede y lo que sucedía es que interrumpiste al médico con tu llegada, así que te recomiendo que ahora guardes silencio y lo observes.

Hans le miró con una leve sonrisa admirado de aquella actitud, resaltó su labio inferior y se cruzó de brazos mientras se apoyaba contra la pared.

-Prosigan- Dijo sonriéndole a Elsa.

El médico siguió tomando análisis de sangre, mirando la herida junto a otros trabajados que ayudaron a abrir levemente la garganta para inspeccionar si algo había sido introducido al atacarlo.

-No hay bala -Dijo el médico – Y debido al corte que tiene en la piel no debió ser un cuchillo. Y continuamos con el rastro de polvos grisáceos alrededor de la herida.

Elsa asintió con un movimiento, salió del lugar a pasar donde estaban las pertenencias del hombre asesinado. Tomó la billetera buscando su identificación para guardarla en su bolsillo.

-¿Y eso es todo de parte de la criminóloga Arendelle? -Hans apareció tras ella.

-Seguiré por mi cuenta a partir de hoy, gracias por asistir -Elsa le sonrió con niña buena para después borrar totalmente la expresión a una de seriedad para irse.

-Woh woh alto ahí -Hans le tomó del brazo para retrocederla a que le mirara el rostro para hablarle - ¿Eso es todo por parte tuya?

-Por parte de los médicos -Elsa señaló de dónde venía – Mi parte empezará el día de mañana, mi parte.

Elsa se apartó de su agarre para retirarse.

-Un placer, Elsa.

Elsa le miró sólo para despedirse e irse.

Cuando salió del lugar en realidad no iba a ir a casa, iba a seguir esto ella. Miró la hora de su reloj marcando las 2:38 de la madrugada.

Después miró la identificación del hombre en busca de la dirección donde debería haber vivido, tan pronto la guardo se apresuró a ir a ese lugar.

No tengo miedo a...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora