Capítulo 9

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Aquella tarde había escrito los avances, imprimió fotografía para pegarles en las hojas correspondidas y seguir hilando las cosas.

¿Qué coincidencia había o semejanza en estos lugares?

Sabía que existe una guerra con Black y Callaghan, necesitaba dejar de preguntar ahora por el peligris y comenzar a preguntar por Black.

Unos golpeteos sonaron en su puerta, se levantó de su escritorio tomando el vaso con vodka y hielo para abrir y encontrar a su amiga pelirroja del otro lado.

-¿Qué haces aquí a esta hora? -Elsa miró las 9:48 de la noche en su reloj de la muñeca, la pelirroja entró patinando debido a que llevaba puestos unos patines negros profesiones y con una sonrisa - ¿Y por qué usas patines?

-Porque es divertido y hoy quiero divertirme -Merida daba vueltas por el despacho de Elsa.

-Pero ya o vas a romper algo.

-Rompe algo conmigo -Merida patinó frente a ella tomando su vaso de vodka para darle un trago.

Si Elsa era amiga de la pelirroja era porque ambas podrían tener el peor día de sus vidas y ambas lo mandaban por la borda, además que saben tolerarse mejor que nadie y hacer bromas sarcásticas y pesadas.

No eran muy afectivas y eso les agradaba a ambas. La única vez que la pelirroja abrazó a la platinada fue el día que fallecieron sus padres.

Ambas salieron del edificio para echarse a andar por las calles.

-¿Entonces vienes? Porque a eso he venido -Dijo la pelirroja con calma patinando.

Elsa tenía que avanzar más rápido para quedar a su lado.

-Un trago.

-¿Sólo uno? -Merida frenó frente a ella – No va alcanzar un trago para que me cuentes sobre ese peliblanco.

Elsa le sonrió a medias sin mucha demostración.

-Pues vayamos ya si quieres oír de él.

Merida patinó feliz y Elsa regresó a avanzar rápido a su lado.

Del otro lado de la ciudad, Jack estaba saliendo de un establecimiento donde se había encargado de decirle a los otros jinetes que cerraran la boca respecto a temas que no le incumben.

Su teléfono celular comenzó a sonar con una llamada, cuando Jack respondió con una mano la otra la sacudió debido a que le caló el puñetazo que dio hace unos minutos.

-¿Si?

-Siento algunas alteraciones con mis jinetes..

-Ya me encargué que aprendan a respetarme -Jack miró sus nudillos verificando que no tuviera sangre o inflamación.

-No me refiero a eso, no me interesa si se llevan bien o no entre ustedes mientras tanto que tú seas el líder de ellos -Se aclaró su garganta – Es respecto a mi linda Toothiana.

-Hoy la vi y parecía tranquila.

-Hmm ¿Ya te he dicho que ambos serían una excelente pareja?

Jack rodó los ojos.

-¿Está todo en orden o no?- Cambió de tema el peliblanco.

-Orden para mi podría ser ya la pesadilla o al menos la noticia de esa criminóloga de Guardianes y por lo tanto mis jinetes no se encontrarían alterados con esta labor que tú tienes.

-Es más complicada de lo pensé y......

-Soluciónalo y necesitas ayuda, por lo tanto le dije ya el nombre a Tooth.

No tengo miedo a...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora