Mi jefe (Sumji)

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Narrado por tercera persona

Las cámaras brillaron, los reporteros se apretujaron unos a otros solo para recibir algunas declaraciones de un chico y una chica que acababan de salir de un avión.

El chico vestía un polo blanco, pantalón negro, zapatos negros y gafas de sol negras.

Mientras que la chica vestía un crop top negro con botones dorados, shorts negros y botas negras de tacón alto que le llegaban hasta las rodillas.

Su aura gritaba autoridad y riqueza. Estos dos hermanos son poderosos porque cuando caminan, los reporteros les dejan paso automáticamente.

Habían pasado cuatro años y ambos cambiaron. ¡Decidió dejarla ser libre, dejarla ser feliz, dejarla amar a quien quiera! Mientras sus sentimientos se quedaban. Cada minuto de esos años, ella piensa en él. ¿Ha comido ya? ¿El está bien? ¿Está bien? ¿Está enojado con ella? ¿La esperó? ¿O encontró a otra mujer mucho mejor?

El último pensamiento hizo que le doliera el corazón. Ella no podría soportar el dolor y la tristeza si eso alguna vez sucediera. Los primeros meses para ella fueron ¡de lo peor! Se encerró en su habitación, no comía mucho y lloraba hasta quedarse dormida. Pero su hermano nunca se rindió y la animó a que se arreglara. ¡Así que lo hizo y aquí está ahora! Una famosa modelo, bailarina y cantante.

-"¡Extrañaba este lugar!"- Dijo el chico y la chica asintió. Los recuerdos de ella y su hombre inundaron su mente.

-"Si."- Dijo ella débilmente. El chico la miró preocupado pero ella le dio una sonrisa tranquilizadora.

-"¿Dónde deberíamos ir primero?"- Preguntó el chico.

-"Deberías descansar. Acabas de salir de una sesión de fotos y una reunión, ¡debes estar cansado!"- La niña sonrió. Entraron en el coche y se marcharon.

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El auto estacionado afuera de una casa enorme que no había visto desde hace mucho tiempo. El chico decidió dormir, estaba agotado por todo incluido el vuelo de regreso a casa. Pero la chica no lo estaba.

Siguen apareciendo pensamientos en su cabeza que parecen impedirle dormir. Así que decidió dar un paseo por el centro comercial cercano durante unas horas para aclarar su mente. Se puso un suéter gris, pantalones cortos de mezclilla y sandalias marrones.

-"¡Jovencita! ¿A dónde vas?"- Preguntó su mayordomo.

-"¡Solo el centro comercial cercano!"- Ella respondió cortésmente y decidió caminar hasta el centro comercial ya que está a solo unas cuadras de distancia. Mientras caminaba, se topó con alguien familiar.

-"¡Oye!"- Dijo la dama.

-"¡Lo siento mucho! No quise-" Ella fue interrumpida.

-"¡¿Umji ?!"- Miró hacia arriba para ver a su amiga de la infancia más antigua.

-"¿Sowon?"-