🌹Aiger Akabane 🌹

657 51 29
                                    

¿Ésto...es amor?









Oye Aiger!!— gritó Naru quien había azotado la puerta de la habitación.—

Naru, te he dicho que no entres a mi cuarto sin tocar.— se quejó el de apellido Akabane.—

Lo sé lo sé, solo quería decirte que iré a jugar con mi nueva amiga.— dijo felíz la de cabellos azules.—

¿Y quién es?— preguntó confundido, hasta ahora no le conocía ninguna amiga nueva a su hermana pequeña.—

Se llama [   ] [    ] , acaba de mudarse al vecindario y lo mejor de todo es que está en el mismo salón de clases que yo.— brincaba entusiasmada la niña.—

Oh, bueno no le des muchos problemas.— dijo para después seguir durmiendo .—

...

Ya era medio día y el flojo de Aiger decidió asomarse para ver cómo se encontraba su hermana , y sí al parecer estaba jugando con alguien solo que ese alguien no dejaba verse .

Eso llamó la atención del pelirrojo , tal vez no era una niña , ¿Qué tal si era un secuestrador?.

Decidió acercarse y ver por si mismo de quién se trataba, pero ups, se había equivocado en realidad si era una niña solo que tenía una sudadera que no dejaba ver su rostro.

Uh, hola aiger.— saludó la hermana menor.—

Eh, hola Naru ¿Cómo están?— preguntó amable .—

Estamos bien, jugaba con [    ] a la fiesta del té, ¿Quieres jugar con nosotras?— habló ilusionada.—

No sé si sea una buena idea, ¿Tu que piensas [    ]?— te dedicó una sonrisa amistosa.—

Por mi está bien, gusto en conocerte aiger.— dijiste sonriente.—

Igualmente pequeña.— respondió alegre mientras intentaba ocultar su leve sonrojo.—

...

Desde aquella vez algo había cambiado en el joven akabane, no sabía cómo explicarlo pero cada vez que te miraba sentía un revoloteo en su estómago.

Su corazón parecía salirse cuando lo tomabas de la mano o le sonrías, también eran muchas las noches en las que no dormía y se la pasaba pensando en ti.

Decidió consultarlo con su padre sobre lo que le pasaba estos últimos días, a lo que él respondió que se trataba de la enfermedad más conocida en todo el planeta, amor.

Si bien había escuchado sobre ese tema antes, lo que nunca imaginó es que lo sentiría con una niña de tan solo ocho años.

Incluso comenzaba a decirse así mismo que era un completo pedófilo, o que estaba enfermo y necesitaba ayuda.

Pero... "Para el amor no hay edad ¿Cierto?".

En un día como cualquier otro tu pasaste de casualidad para preguntarle a Naru sobre si ella se había quedado con tu pluma de conejito por accidente.

Preguntaste si ella estaba en casa y sus padres negaron, ya que ella a esta hora estaría con Aiger ayudándolo a practicar Beyblade.

Así que , te dirigiste al lugar donde solian entrenar y los vistes a ambos. Te acercaste y los saludaste , pero Aiger se encontraba muy extraño.

¿Tu pluma de conejito?— dijo Naru intentando recordar si ella la tenía.—

Oh sí, lo siento por error la puse en mi cartuchera, ahora vuelvo con ella.— salió corriendo en dirección a su casa en busca de aquel objeto.—

¿Cómo estás Aiger?— preguntaste sonriente.—

Bi- bien.— respondió con un tono robótico.—

¿Estás bien ? , Estás rojo y nervioso.— hablaste mientras observabas su comportamiento.—

Sí , yo estar bien.— miró hacía otro lado, literal estaba colapsando enfrente tuyo.—

Aiger.—lo tomaste de la mano mientras hacías un gesto de tristeza, lo cual llamó su atención.—

¿Hice algo malo?— preguntaste haciendo un adorable puchero.—

No, claro que no, tu eres linda y buena.— intentaba hacerte sentir mejor.—

¿Me abrazas?— eras como el detonante que hacía que Aiger se volviera vulnerable.—

Por supuesto que sí.— te tomó entre sus brazos y te apegó de forma amorosa y a la vez posesiva a su cuerpo.—

¿Interrumpo algo? 7w7— Naru miraba de forma pervertida a ese par.—

No— respondieron a la par —

Ya tengo cuñada.— sonrió triunfadora la peliazul.—

one shots Beyblade burstDonde viven las historias. Descúbrelo ahora