Sweet Bitter ᵇⁱⁿʷᵒᵒ

☆ 64°•

MoonBin abrazo al peliazul desde su espalda mientras veían los delfines en el acuario, DongMin sacaba fotos de los animales marinos con la cámara de MoonBin. Por primera vez desde que el pelinegro entro a este mundo de la fama, estaban teniendo una cita, despues de mucho tiempo. MoonBin le había dado a elegir a DongMin entre una cena o un centro de atracciones, y el peliazul con una orgullosa sonrisa eligió visitar el acuario de Seúl.

Entrelazarón sus manos y salieron del lugar para mirar la hermosa playa con los barcos navegando sobre ella. DongMin tomo una fotografía del lugar junto a una con MoonBin distraído.

—¿Que harás con todas esas fotos? — pregunta el mayor dándole un sorbo a su bebida.

— Las guardaré como un lindo recuerdo de nuestra cita.

—¿Y se las enseñarás a nuestros hijos?

— Probablemente.

MoonBin esboza una sonrisa y baja su mirada a su teléfono revisando sus mensajes, entre ellos tenía uno de Bambam.

Bam: Hey, Bin, ¿No has hablado con Jackson? Desde hace dos días que no se de el y no atiende mis llamadas.

MoonBin fruncio sus cejas respondiendo el mensaje.

Bin: ¿Dos días? No he hablado con el, ¿Has intentado ir a su casa?

Bam: Si y no abre, Jaebum casi tira la puerta pero parece que no hay nadie.

Bin: Joder, no se donde pueda estar, de seguro anda metido en algún club como suele hacer las veces que desaparece.

Bam: Quizás... Pero igual me preocupa, el no es de desaparecer tantos días. Si te llega a llamar o algo, házmelo saber.

Bin: De acuerdo, te estaré avisando.

Dejo su celular sobre la mesa y miro hacia afuera sintiendo algo extraño en su pecho. De pronto siente unas cálidas manos tocar las suyas y gira su rostro para ver la hermosa cara de su novio observándolo con curiosidad.

—¿Estás bien?— pregunta el peliazul.

— Si, es solo que Jackson no aparece y Bambam está preocupado.— explico.

— Oh, quizás esté en algún lugar de esos que suele frecuentar para beber.

— Si, lo mismo le dije a Bam, pero eso no quita que no se preocupe, de todas formas es su novio y si fuera mi caso también estaría alterado de no encontrarte.

DongMin mordió su labio inferior sosteniendo una sonrisa, se inclino hacia adelante aprovechando que la mesa era pequeña y plantó un corto beso en los labios del contrario.

— No te preocupes, ya aparecerá, no es como si lo hubiesen secuestrado o algo así.— Bromeo.

MoonBin sonrió asintiendo y tratando de no preocuparse también. Al fin y al cabo Jackson era como su hermano y pensar que algo malo le pudiera haber pasado, solo lo aterraba.

Esperaba estar equivocado.

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La tenue habítacion solo era alumbrada por la luz del día que pasaba por las ventanas. El castaño quien yacia sentado en una silla abrió sus ojos lentamente adaptándose a la oscuridad de la habitación. Miro todo su alrededor dándose cuanta que estaba en un cuarto totalmente vacío, solo tenía una cama con un colchón, una mesa de madera y un ropero.