Capítulo 21

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    Los rumores sobre Allie y su futuro se han vuelto la comidilla del pueblo, especialmente luego de que todos la vieran con su hermana en una sesión fotográfica para una revista de Nueva York.

Sus seguidores en Instagram comenzaron a aumentar rápidamente por la necesidad de las personas para saciar su sed de cotilleo.

Sesiones de fotos para dos revistas, cantando karaoke con Prue y un par de modelos rusas, fiestas privadas en Soho con celebridades, eventos de marcas de maquillaje con influencers, fotografías con famosos, cenando en Four Seasons con Ravi Chabra y su equipo de modas de la revista para la que trabaja, paseando por Central Park, patinando sobre la pista de hielo con chicos lindos, celebrando el Año Nuevo con su hermana en una magnifica fiesta en el Upper East Side y bailando con un actor famoso.

Hasta ese entonces, solo eran rumores sin fundamentos, pero cuando llegó el día del viaje de esquí y Allie avisó a sus amigos que no podría verlos hasta el primer día de vuelta a clases porque tenía una sesión de fotos, las cosas se salieron de control.

Algunos afirmaban que Allie dejaría la escuela para ser modelo de Alette; otros decían que sus padres la habían matriculado en una escuela privada de Nueva York; que estaba embarazada del vocalista de una banda rock con el que estuvo en una fiesta; que ella y su hermana se mudarían juntas a un apartamento en Greenwich Village para abrir una cafetería literaria, entre otras cosas cada vez más descabelladas.

Los rumores comenzaron a apaciguarse cuando Allie llegó a la escuela el primer día de clases luego de las vacaciones de invierno, acompañada de su hermana mayor, quien mantuvo una conversación privada con el señor Edwards dentro de su oficina, encendiendo el chisme sobre su presunta relación.

Marley estaba completamente furiosa.

Nadie hablaba de ella y su nuevo novio universitario que acaba de mudarse a Charmin Heinz desde Bruselas; tampoco se hablaba del nuevo descapotable que sus padres decidieron regalarle para navidad; su bichectomia; los cinco kilos que perdió al hacer ayunos intermitentes o el hecho de que las animadoras habían clasificado para el campeonato estatal.

Todo era Allie Henstridge esto y esto otro.

—Maldita enana pelirroja —masculla cuando la ve en los pasillos después de la primera clase.

Entra al baño y se encierra dentro de un cubículo, pensando en cómo deshacerse de ella sin tener que lidiar con las consecuencias.

Entonces el nombre de Julie parece flotar dentro de su cabeza.

Sale del cubículo y se arregla el maquillaje frente al espejo con una sonrisa que no puede ocultar.

Le lanza un beso a su reflejo y busca a Julie por los pasillos.

Camina como un león hambriento que busca a su presa y se regocija de alegría cuando la encuentra distraídamente revisando su casillero.

—Hey, Julie —saluda cuando llega a su lado, sobresaltándola y haciéndola botar su móvil al suelo. Se agacha para recogerlo y se lo pasa en las manos, sin apartar la mirada—. ¿No hablas? Un gracias seria agradable.

Julie mira hacia todos lados antes de encogerse de hombros y cerrar su casillero.

—Gracias, Marley —responde con voz estrangulada—. Creí no que no nos hablaríamos en la escuela para que las personas no sospecharan.

—Eso ya no importa. Después de todo, ya le dijiste a Allie que ambas sabíamos sobre su relación con el señor E.

—Ellos no están saliendo —susurra—. Su hermana estuvo aquí esta mañana. Ellos sí están saliendo.

Just That Girl: Porque amar nunca fue tan prohibido ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora