Caleb
La abrazo mas a mi cuerpo sintiendo su calidez y su exquisito aroma ¿Cuando esto me sucedió? ¿De que comenzara a enamorarme de ella? pensé que solo era porque es mi hermana le tenia cariño pero luego cuando creció y veía que se estaba convirtiéndose en toda una mujer, ahí todo empezó a cambiar en mí, intente huir de esos sentimientos pero ahora son mas fuertes y difíciles de ignorar. Ella estaba en mi pensamiento todo los días y me llenaba de celos de solo pensar que algún día algún chico la aparte de mi vida.
Esto me aterraba mucho porque ¿Ahora que iba a hacer? Yo la amo y quizás pensaría que estoy loco pero completamente loco por ella.
Acaricio nuevamente su cabello y moría de ganas de besarla otra vez, así que no puedo resistirme de nuevo me inclino para darle un beso pero su cuerpo se mueve entre mis brazos y me sobresalto cuando comienza a moverse.
— ¿Caleb? — Dice con voz ronca mientras bosteza.
— Hola Leah. — Sonrió tocando su brazo — ¿Que haces aquí, pequeña? ¿Tuviste una pesadilla?
Ella asiente como una niña haciendo un puchero y me causa ternura, Leah se acuna mas a mi cuerpo pasando su brazo por mi cintura.
— ¿Quieres contarme?
— Sueñe que estaba en nuestro lugar favorito y yo corría asustada porque alguien estaba detrás de mí, tenia unos ojos azules intensos pero no podía mirar bien su rostro solo sus ojos, él quería hacerme daño y no entendía porque. Y luego desperté asustada es la primera vez que sueño con eso. — Su cuerpo se estremece entonces la abrazo y beso su frente.
— Solo fue un mal sueño, nadie va hacerte daño mientras yo viva, Leah. Te protegeré no solo de tus pesadillas sino del mundo real también.
— ¿Por que tan lindo? Eres el mejor hermano del mundo. — Me da un beso en la mejilla que me deja con ganas de besarla en sus labios y ponerla debajo para mi para...
Ok, Caleb William Bomer debes parar ahora, apenas estas aceptando que estas enamorado de ella y ya piensas en... Si debo calmarme porque esto no esta bien, tenia hacerlo algo para olvidarme de Leah porque esto es prohibido.
No podía enamorarme de mi propia hermana.
— ¿Que tal es la chica que conociste ayer? — La voz de Leah me saca de mis pensamientos.
— ¿Por que la pregunta?
— Solo quiero hacer conversación contigo. — Dice bromeando utilizando las mismas palabras que yo cuando estábamos en la playa.
— Pues Lisa es agradable y me cae bien, estamos en la misma clase y es la presidenta.
— Wow entonces es toda una cerebrito. — Dice haciendo una mueca.
— Y muy hermosa. — Digo sonriendo esperando alguna reacción de su parte, solo lo había hecho para molestarla. Leah se separa un poco de mi y finge un bostezo.
— Entonces te gusta, Lisa. — Murmura seria.
— Si pero no tiene que ver con lo romántico.
— Igual estas en tu derecho de salir con alguien desde que terminaste con Joselin.
— En este momento no estoy para relaciones, tengo mucho cosas en la mente como por ejemplo gobernar una nación.
— Seras un buen Rey, yo se que sera así.
— Gracias Leah, aunque es difícil asimilar todo lo que ha pasado apenas tengo 18 años y ya soy Rey, no se si vaya a soportar tanta presión además no tendré una adolescencia normal.
— Nosotros nunca hemos sido normales. — Dice sonriendo— Pero tienes el apoyo de tu familia sobretodo el mió. — Luego con su mano acaricia mi pecho desnudo, dios mio si seguía tocándome de esa forma dudo mucho que pueda controlar mis hormonas por más tiempo.
— Si...— Trago saliva sintiéndome incómodo y llego justo a mi entrepierna, esto no estaba bien, tenia que parar ahora. Así que me aparte un poco de Leah. — Creo...Creo que deberíamos dormir es tarde. — Digo balbuceando como idiota.
— Tienes razón, aun tengo mucho sueño. Que tengas buenas noches, Caleb.
— Y tu también, Leah. — Ella suspiro y cierro los ojos abrazándome para luego quedarse dormida minutos después mientras yo la miraba.
Cierro mis ojos para dormirme aunque me costo un poco, pero logre hacerlo y tuve el sueño que siempre tenia con la chica rubia que corría por el prado entonces fui detrás de ella porque quería ver su rostro.
— ¡Hey! ¡Espera! — Sigo corriendo detrás de ella entonces se detiene en medio del camino y me acerco cauteloso. — No sabes lo mucho que estado esperando este momento, he querido conocerte desde que comencé a soñar contigo.
Entonces me acerque a ella, ya que estaba despalda solo su cabello se movía con el viento y no podía ver mucho su rostro. Toque su hombro despacio para poder girarla hacia a mí.
— ¿Leah? — La mujer de mis sueños es mi hermana, estoy atónito y ella me sonríe se acerca a mi para besarme sin pensarlo dos veces le sigo el beso como siempre había querido hacerlo.
Tomándola de la cintura y ella con sus manos alrededor de mi cuello, no se en que momento paso pero estábamos acostados en el césped, quería tomarla allí mismo y eso lo que iba hacer, bajando lentamente la manga de su vestido mientras besaba su cuello, ella se mordió el labio gimiendo disfrutando lo que estaba haciéndole y eso fue suficiente para excitarme aun más, iba hacerle el amor.
— ¿Caleb? — La voz de Leah se escucho muy baja. — ¿Caleb? ¡Despierta!
Oh no, otra vez no ¡Maldición! ¿Es que no se me va a dar? ¿Ni siquiera en sueños? suelto un gruñido mientras me despierto de aquel increíble sueño donde Leah era mía.
— Wow mi hermanito amaneció bastante feliz.— Escucho la risita de la mujer que me tiene loco hasta en mis sueños, es como una droga a la cual me vuelvo más adicto.
— ¿Leah? — Restregando mis ojos con la mano mientras bostezo. — ¿De que estas hablando?
Leah esta arrodilla en la cama riéndose pero trato de mirar su cuerpo tenia una franelilla y pequeño short que dejaba poco a la imaginación y yo frunzo el ceño sin entender porque se esta burlando, hasta que señala hacia a mí con su mano.
Mi vista baja a mi entrepierna como es de esperarse tengo una gran erección, me siento avergonzado y rápidamente me cubro con la sábana pero Leah sigue carcajeandose, si supiera que estoy así por ella no estaría riendo más las cosas fueran distintas.
— ¿En que estarías soñando, Caleb? ¡Eres un pervertido!
— Callate— Digo enojado aunque se que seguro estoy sonrojado como un idiota. — Esto es normal que a los hombres nos pase, vete a tu habitación Leah y deja de reirte no es gracioso.
— Esta bien, esta bien. — Levanta la mano en forma de rendición y se baja de la cama. — ¿Soñabas con Lisa? — Pregunta arqueando una ceja.
— Leah ¡Vete! — Gruño molesto.
— Bien, señor gruñón. Ya me largo de su habitación nos vemos abajo para ir a clases, date un buen baño de agua fría primero, majestad. — Hace una reverencia bastante graciosa y trato de mantenerme serio.
Luego sale de mi cuarto y me acuesto de nuevo en mi cama llevando mis manos a mi rostro y grito de frustración, me gustaría volver a mi sueño y terminar lo que comencé con Leah, ya que a real no la podía tener.
Tenia que hablar con alguien de esto, antes de que me volviera loco.
¿Les gusto el capítulo de hoy? ¿Voy bien con esta temporada? Me gustaría su opinión ¿Quieren un maratón?
¿Quieren capitulo para mañana de A través de tus ojos o Game Over?
Me cambie el username por sino se han dado cuenta :)
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El Romance Prohibido Del Rey (Book#3).
RomanceLa tercera parte de la saga de la familia real Bomer. CALEB BOMER Y LEAH BOMER