Demonios

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Se miraban a los ojos mientras la musica seguía, era como si solo existieran ellos en esa pista infernal aunque hubiera miles de demonios moviéndose en  la pista   con sus respectivas parejas de baile para ellos solo existía el que estaba frente  a ellos, marco se había olvidado de que venía con su rubia amiga pero nada de eso le importaba en estos momentos solo le importaba el contrario, no había notado que el demonio lo traía embelesado y empezaba a creer que no solo era porque le tuviera aprecio o porque le agradara, su corazón latía y aunque le diera un infarto a sus padres sentía que era lo que quería  y por su parte el demonio también sentía su corazón latir, algo raro porque no estaba supuesto a tener un corazón latiente, en ese instante lo supo por completo aquel humano de verdad lo había flechado ahora no solo bill estaba embelesado con un humano sino también el, lo que menos creyó que le pasaría en la vida pero poco o nada le importaba solo quería estar con el humano, poco a poco sus rostros se fueron acercando y la música poniéndose mas intensa preparándose para la llegada de la luna roja, todas las parejas dejaron de bailar para ver en el centro a aquellos dos que parecía que no le prestaban atención a nada mas en el ambiente, también la escena fue visita por la rubia preparada para ir a detener lo que ella creía que era algo malo para el moreno.

Maldito - la rubia los separó y la musica paró de inmediato, la luna roja interrumpió su travesía y paró antes de llegar a iluminar a las personas allí, la luna roja no aceptaba tres alguno de ellos tenía que moverse - intentaste aprovecharte de marco.

¿Yo? - murmuró con molestia - tu  interrumpiste el ritual de la luna roja, sal del camino para que cumpla su travesía.

No, tu sal del camino - ella quería echar al de pelo rosa de allí, estaba segura de que el que no debía de estar allí era el demonio - muevete para que el ritual se complete.

¡Silencio! - todos voltearon a ver al imponente rey del inframundo - ¿como te atreves a interrumpir el ritual de la luna roja? - la rubia no sabía si se lo decía a ella o al demonio aunque era mucho mejor pensar que se lo decía al  estúpido demonio de pelo rosa - todos haganse a un lado - separó a marco, tom y star  esperando que la luna escogiera.

La luna retomó su camino parando frente a los tres dejando que marco estuviera a su elección, el moreno comenzó a sentirse nervioso, tenía que escoger entre su mejor amiga desde siempre y su amor imposible obviamente era imposible tanto porque eran hombres como porque tom era un demonio y el un simple humano, lo que no sabía era que si tomaba la decisión errónea la luna no los iluminaria y además de eso recibirían una terrible maldición por detener el ritual de la luna roja, aunque no muchos sabían la luna no era para nada paciente ni comprensiva, tenía que escoger rápidamente si no quería que todo se viera arruinado.

Recuerda porque estamos aquí - le murmuró la rubia, estaban allí porque la rubia quería "ayudarle" pero tal como le dijo tom terminó por perjudicarle mas.

Tom no dijo nada porque también estaba sorprendido por aquello aunque no estuviera seguro de querer estar atado para siempre al moreno no quería que este se fuera con la rubia lo sentía egoísta de su parte pero esa niñata irresponsable no se lo merecía, marco miró a las dos personas que estaban frente a el, ella era su amiga pero era completamente cierto que simplemente lo metió en mas problemas aun cuando le dijo que no sería buena idea y tom, el no había hecho nada malo pero no se sentía listo como para decir que amaba al demonio enojon, aun así tenía que escoger por la presión y su respuesta estaba clara aunque fuera difícil estaba mas que claro que no podía poner lo que quería sobre lo que de verdad amaba aunque no fuera seguro.
Se dirigió al demonio y aunque la rubia quiso detenerlo se usó un hechizo demoniaco para evitar que se moviera de su lugar, tomó las manos del demonio sorprendiendo a este mismo pero al mismo tiempo sintiéndose cálido para ser iluminados por aquella luz extremadamente roja y aquel sentimiento cálido reconfortante.

¿A mi? - preguntó con curiosidad mirando al moreno, preguntándose porque lo había escogido.

Siempre a ti - murmuró algo avergonzado para terminar lo que durante el baile iban a hacer, darse un beso - espera la mascara - se la iba a quitar pero fue detenido por el demonio - es cierto - se retractó de quitarse la mascara al recordar que era un humano entre demonios.

Nada que ver aquí - el demonio en un movimiento rápido hizo aparecer el elevador que la rubia había sacado cuando quiso ir a la fiesta, metió a la rubia, a marco y el mismo en el elevador para regresar rápidamente.

Todos quedaron en silencio montados en el elevador que gracias al cielo podía llevarlos de regreso a donde la rubia lo había invocado, tom aunque feliz por enterarse realmente de lo que sentía por el humano estaba molesto porque pusieron sus vidas en riesgo simplemente para cumplir el capricho de la rubia quería mucho a marco pero no estaba dispuesto a que siguiera siendo tan blando con la rubia hasta el punto de hacer lo que la chica quiera  con tal de que ella estuviera bien, hablaría con su ¿novio? Aun no lo tenía claro, marco también estaba avergonzado por el comportamiento de su amiga aunque sabía que como siempre la rubia ignoraba eso, sabía que la rubia solo pensaba en que su plan había fallado pero al final lo arreglaría, bueno, si era así la rubia pensaba en eso.

Marco - le murmuró después de bajar del elevador  - aun puedo ayudarte podemos arreglar esto.

¿Arreglarlo? -murmuró con molestia el mexicano - ¿has pensado que quizá no quiero arreglarlo? - la rubia estaba a punto de hablar pero el moreno continuo hablando - las cosas como están van bien, no quiero que te metas y luego tengamos mas problemas para que después vuelvas a decir "lo arregláremos" - la rubia quería hablar pero el moreno no la dejó - siempre es lo mismo contigo, nunca quieres aceptar las consecuencias ni cuando ya hiciste lo suficiente, no quiero mas de tus locos planes por favor vete ahora.

El solo te está lavando el cerebro - dijo con molestia la rubia.

Mira star, el quiere pasar tiempo conmigo no soy como tu - estaba enojado y no le importaba si la rubia se sentía mal - yo no lo obligó a pasar tiempo conmigo disque para arreglar algo que yo mismo provoqué - la rubia con rapidez se fue del lugar azotando la puerta - ¿crees que me pasé?.

Quizá un poco - murmuró el moreno suspirando, quería a su amiga pero estaba de acuerdo con lo que el mayor había dicho, la rubia debe arreglar sus propios problemas y no entrometerse con los de los demás ni tampoco meter en problemas a los demás, no estaba seguro de si su amiga entendería pero por lo menos el ya entendía que lo que sentía por el demonio iba mas allá del cariño de amigos.