Ángel | Cristian Pavón [2]

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CAPÍTULO 48 | Familia y costumbres.

Un mes después.

Emma.

Cristian y yo no nos habíamos vuelto a ver desde que llegué de esa semana en Los Ángeles.

Sin embargo, eso no cambió mis pensamientos ni los de él durante lo que hablamos en los días juntos allá, hablamos diariamente desde que pise Argentina, nos llamamos e hicimos videollamadas mientras hacíamos nuestras cosas. Incluso hice videollamada en una sesión de fotos para mí promoción y cambiar las fotos para mi cuenta de Spotify, todo eso mientras hablaba y charlaba con Cristian.

Ambos estuvimos de acuerdo de hacerlo así, de esa forma nos mantendremos juntos, a pesar de la distancia y no volvernos locos no sabiendo que hacía el otro.

Él continuaba jugando más de seguido allá y haciendo amigos estrellas como yo acá cumplía con mi deber, salí solo una vez de Argentina y fue para ir a España a hacer una presentación en una radio que consiguió Germán para promocionarme en esas tierras al volver continúe yendo al estudio, siempre que podía volvía, siempre tener proyectos eran bueno a pesar que no sabía cuándo volvería a sacar música nueva después de que mi nuevo disco salió hace más de casi tres meses.

Cómo dije, no ví a Cristian más pero me animaba saber que él ni bien terminará la temporada volvería a Argentina aunque más específicamente a Córdoba dónde iría a pasar tiempo en familia y creo que sí no me equivocaba pasaría tiempo en familia allá.

Sabía que hoy llegó a Argentina y que iba directo a Córdoba prometí que cuando pudiera descansar de mi día largo iría, sí el me invitó a que vaya Córdoba. Cosa que me hacía recordar al año pasado cuando me hizo la misma invitación pero todo medio que se pudrió. Rogaba que este año no fuera lo mismo.

Son las doce de la noche pasada cuando miró por última vez mi celular, le contesté el último mensaje a Cristian que me avisé cuando dormiría o cuando llegará a Córdoba para dejarlo descansar en paz y lo dejo sobre la alacena.

Lavo el plato y tenedor que use en la cena, en la cena que yo misma preparé. Mientras le tiró detergente a la esponja observo la ventana que daba a mi patio, noto como el agua de la piscina se movía lentamente, había vientito, era una hermosa noche.

Especial para birras.

Calor era lo único que tuvimos estos días así que a estas horas era más fácil disfrutar de la nueva estación que se avecinaba, también me hace acordar de la canción que comencé a escribir esta semana. Fue una idea, le dije a Germán y le encantó. Más le encantó que se pudiera dar una idea de que yo fuera dueña de la canción del verano 2020, vendería mucho más para comenzar mi gira el año que viene.