Croquetas y wasaps - Begoña Oro

8. Lo raro y lo infrecuente

La primera vez que me di cuenta del rari que es Unai fue cuando tuvimos que hablarle a Nerea. Cada alumno nuevo que ha entrado en nuesteo colegio, desde Nerea está Zaera, ha pasado por un momento que nunca olvidará, algo así como el momento de revelación del extraño caso de Unai Hernán Sabina No-se-qué Garzón.

Hasta entonces, hasta que tube que explicarlo, me parecía tan normal.

Lo que hace raro a Unai no es que se muriera su padre. Que tu padre se muera cuando tienes cuatro años, más que raro yo diría que es infrecuente. Y créeme, de eso, de frecuencias y probabilidades, algo sé, porque mi padre trabaja haciendo estudios estadísticos.

Aún así que te suceda algo que no suele suceder a los demás deja sus marcas.

Lo infrecuentes suele llevar al aislamiento. Pero lo raro lleva directo al psicólogo.

De eso también se, mi madre es psicóloga.

Sí, mi padre se dedica básicamente decir que es NORMAL mientras mi madre se dedica básicamente a tratar con lo RARO. Mi padre juega el tenis de mi madre hace yoga; mi padre es cuadriculado y mi madre es redonda. Lo verdaderamente raro es que ellos mismos no se dieran cuenta desde el principio que lo suyo no podía funcionar. Supongo que, cuando quieres a alguien, siempre tienes la esperanza de que las cosas funcionen. No, no es esperanza, es ilusión, algo que no existe en realidad, un espejismo. Y ahora que pienso en un espejismo, en una ilusió,ya me veo en un oasis tumba entre palmeras con Lucas. He tomado la precaución de cubrirle la cara con un turbante de sus que usan los tuaregs y solo le veo los ojos y la nariz. Pero lo sé perfectamente. Sé que debajo del turbante, está sonriendo. U ya no sé dónde estaba ni que iba a decir...

Lucas...

Estás tan guapo vestido de tuareg. Y el sol de la tarde hace que la sombra de tus pestañas se refleje sobre tus pómulos y...

Cielos, estoy apunto de entregarme a mi propia fantasía romántica en el desierto con un beduino misterioso qué oculta su sonrisa tras un turbante. ¿No es patético? ¿No es ridículo? ¿Es esdrujulo? ¿Es frecuente? ¿Es normal?

¿Que opinas papá? ¿Qué opinas, mamá?

¿Y tú? ¿Qué opinas?