El final de una etapa el comienzo de una historia (cuarenta y dos)

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Anna

Llevamos una semana en Las Vegas para firmar la venta de la acciones y el divorcio, al tener el mismo abogado Clara y yo vamos a firmar los papales con un día de diferencia, la conversación que Ted y yo teníamos pendiente para hablar sobre el divorcio se ha convertido en discusiones de no más de quince minutos todos los días donde acabamos enfrentados a si que me resigno a la firma de la disolución de nuestro matrimonio sin llegar a una conversación como adultos.

Acabo de llegar a mi habitación más alterada que nunca, la conversación con Ted ha sido horrible, me ha suplicado que vuelva con él, literalmente se ha puesto a llorar como un niño pero me ha sido imposible decirle que sí por más que quiera, al ver que no conseguía dar mi brazo a torcer ha firmado los papeles del divorcio y me los ha entregado de muy malas maneras asegurando que voy a arrepentirme, estoy tan cabreada que de un arranque de cólera salgo corriendo de la habitación para dirigirme nuevamente a su despacho, cuando estoy en recepción uno de los recepcionistas me dice que Ted se encuentra en el bar, me encamino hacia allí para ponerle las cosas claras, no fui yo la que cometió un error él lo estropeo todo, lo busco con la mirada y no puedo creerme lo que estoy viendo, el desgraciado se está besando con una chica que podría ser su hija, voy hecha una fiera hacia él y cuando los tengo delante agarro la primera copa que veo y lanzo el líquido que tiene sobre sus caras lo que hace que se separen de golpe.

__ Así es como pretendes que vuelva contigo

La rubia de bote se queda mirándonos con cara de alucinada mientras el contenido de la copa resbala por su pelo.

__ Que esperabas Anna que siguiera célibe a ti después de lo que me has dicho.

Yo miro a la rubia y tajante le señalo la puerta con el dedo mientras le digo__¡ fuera¡ __ Esta se levanta y sale casi corriendo

__ ¡Sí¡, es lo que esperaba de un hombre que lleva suplicándome desde que nos separamos que volviera con él, ¡Si, es lo que espero de la persona que dice que se arrepiente de las malas decisiones que tomó, lo que no espero de ese hombre es que ni diez minutos después de haber tenido una conversación tan importante con la mujer que dice amar es encontrarlo manoseándose con otra mujer.

__ Y yo Anna que tengo que esperar de ti, eres tú la que se ha marchado a vivir a otra ciudad para no compartir tu vida conmigo, la que tiene un relación con otro hombre desde hace meses, la que se niega a darme una oportunidad, eres tú la que ha solicitado el divorcio, que tengo que esperar de ti, porque solo pides pero no me das nada a lo que agarrarme.

__ Yo, no

__ Vuelve conmigo Anna, comencemos de nuevo en otro lugar los dos juntos, déjame demostrarte que vale la pena estar juntos.

En ese momento se levanta y me besa con pasión, dios que bien se siente estar entre sus brazos otra vez, no solo me dejo besar yo también le beso a él con desesperación.

__ Quédate conmigo Anna__ me susurran en el oído, nos quedamos abrazándonos con fuerza, me siento en casa, reconfortada, es el lugar al que pertenezco pero casi sin darme cuenta enfoco a la rubia que se estaba besando con mi marido, está cuchicheando con otra chica riéndose a carcajadas mientras nos miran y siento nuevamente la angustia de la inseguridad, ella me mira y realiza una mueca con sus labios de suficiencia como si supiera algo que yo desconozco y eso hace que me estremezca de miedo, entonces con todos mis fuerzas lo aparto de mí.

__ No puedo Ted, no puedo.

__ Anna por favor__ vuelve a suplicarme, yo vuelvo a mirar a la rubia y Ted se da cuenta

__ No la conozco, se sentó a que le invitara a una copa, estaba desesperado Anna enfadado por tus rechazos y por el divorcio solo pensé, si ella no me quiere otra lo hará.

APRENDIENDO A AMAR DE NUEVODonde viven las historias. Descúbrelo ahora