Y ahi estaba yo, en un tren camino a Murcia, analizando todos los paisajes que iba viendo por la ventana y sumida totalmente en mis pensamientos. Flavio llevaba diciendome todo el mes que por favor bajase con el a Murcia a la comunión de su hermana pero yo me iba a Beniarrés, yo pensaba en bajar, claro que lo iba a hacer, pero quería darle una sorpresa.
Dos días antes conseguí contactar con Lola, su madre, para que me ayudase con la sorpresa, yo le dije a Flavio que no podía bajar a Murcia porque me iba a ir a Madrid directamente que me habian salido unas colaboraciones y ya que nos veriamos cuando el subiese.
Me quedaban apenas unos minutos para llegar a Murcia y ya había avisado a Lola que me mando la ubicación, solo estaba a cinco minutos de la estación por lo que podria ir andando perfectamente.
Me baje del tren y camine con la maleta y la mochila a cuestas, perdiendome por todas las calles posibles de Murcia y lo que iban a ser cinco minutos terminaron siendo veinte. Cuando por fín lei el cartel con el nombre de la calle que me había mandando Lola suspire aliviada, ahora solo tocaba encontrar el número de la casa.
Avise a Lola para que bajase y la vi a lo lejos apoyada en el marco de la puerta, supuse que era ella porque era la única persona que estaba en la calle y porque la reconocía aunque fuese un poco de las fotos que había visto, por lo que emprendi el paso hacia la puerta de su casa, esta nerviosa la verdad, nunca habia conocido a su familia y hoy la iba a conocer a toda menos a su hermana Bea que no estaba en España.
-¡Pero bueno Samantha! ¡Que alegría verte al fin!.
Dijo rodeandome con sus brazos y dandome un cálido abrazo, me recordaban un montón a los abrazos de Flavio.-Joe igualmente, pense que no llegaría.
Le dije riendome y contandole el show hasta llegar a donde estaba ahora mismo.-A ver, quedan 3 horas aún para la comunión por lo que te da tiempo a arreglarte de sobra, le puedes coger lo que quieras a Bea, me lo ha dicho en cuanto se entero de que venias y le dio mucha pena no estar aqui.
-Joe muchas gracias, que mona. ¿Y Flavio? ¿Dónde esta?.
Le pregunté entrando detras de ella a la casa y montandonos en el ascensor para subir hacia su piso.-Esta en su cuarto, preocupado porque no le contestabas a los mensajes.
Me dijo riendose, era verdad, no había hablado con el desde ayer por la noche para decirle que hoy me iba para Madrid.
-Pobre, encima llevamos como dos semanas sin vernos. ¿Entonces, voy y llamo a la puerta?
Le dije cuando se abrio el ascensor y pusimos un pie en el rellano.-Si quieres puedo ir y le digo que salga al salón un momento.
-Ay si pues perfecto.
Cuando entramos a su casa lo primero que escuche fue las teclas del piano y me rei porque este chico tenía obsesión con el piano y a mi me parecia perfecto, no había nada que me diese más tranquilad que escucharlo y verlo tocando el piano.Lola fue hacia la habitación de Flavio y la oí decir:
-Flavio ven un momento al salón, tengo que mover la mesa y no puedo sola.
Oí como las teclas del piano dejaron de sonar de un momento a otro y los pasos se aproximaban mas a ella.
-Pero... ¿SAMANTHA?.
Dijo Flavio corriendo hacia ella y envolviendola entre sus brazos, dejandole varios besos en el cuello para luego separarse y dejarle un beso en los labios.-Sorpresa.
Le dije sonriendole para luego abrazarle otra vez.-Pero vamos a ver si me habias dicho que no ibas a venir.