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—... ang... Joven HuaiSang.—Le llamó unas veces más el chófer hasta que tocó el claxón del auto haciendo que el menor diera un sobresalto.

—¿Sí? ¿Qué pasa?

—... Llegamos.

El menor desvió su mirada hacia la ventana y efectivamente, estaban frente a la mansión que residía. Un suspiro salió de sus labios antes de sonreírle falsamente y agradeciendo al chofer, se bajó del vehículo. 

Lo que Li le reveló aún pasaba por su mente. No entendía como era que YanLi y ZiXuan parecían felices de tener al bebé que esperaba la mujer, pero entonces... ¿Cómo terminó tan mal? ¿Cómo nunca supo de eso? Lo más importante de todo, ¿Por qué en su primera vida no conoció al posible hijo de la pareja? 

A menos que haya perdido al hijo... Si ambos rompieron fue porque ZiXuan no estuvo para ella... Si él tanto la amaba, es probable que le pusieron una trampa... 

Una risa seca escapó de sus labios y alzó su mirada hacia el cielo, cerrando los ojos. En su primera vida, consideraba a sus amigos y confiaba en ellos, si para HuaiSang le resultaba difícil contarles que en algún momento se sintió atraído por su hermano, después de todo, era por una buena razón, pero ¿Qué hizo él cuando ellos no estaban bien al saber que no fueron tíos? 

Todo ese tiempo creyendo que ellos eran fuertes, que estaban bien, pero el hecho de enterarse de que YanLi estaba embarazada, cosa que tal vez en la primera vida pasó igual y perdió al bebé, ya no sabía si seguir creyendo. La falta de confianza entre sus amigos le afectó, podría haber entendido, pero ¿Entender qué? 

Las gotas que caían del cielo mojaron a su rostro, pero nada de eso le importó, hasta que sintió una presencia acercarse, la única que podía reconocer, seguido una toalla encima de su cabeza, por lo que abrió los ojos encontrándose con su hermano, quién lo miraba preocupado.

—¿Estás bien? Entremos a casa. 

El menor quería decir algo, pero no sabía qué, así que sólo se dejó llevar por el mayor. Cuando ya estaban dentro, MingJue tomó la toalla y le secó la cara, tal gesto era lo que quería. 

Desde su primera vida, deseaba que su hermano lo mirará, lo mimará y le diera total atención. 

—A-Jue... 

—Estás raro.—Dijo tratando de disimular el temblor de sus dedos al escuchar como el menor lo llamó.—¿Todo está bien? 

No. Nada está bien.

De pronto sintió como lágrimas brotaban de sus ojos, estaba a punto de tocar su rostro, pero el mayor se adelantó, secándolas suavemente, a pesar de que era un bruto. 

Si sus amigos no confiaban en él, pero el mayor siempre creyó en él, incluso cuando en su primera vida comenzó a estudiar artes, a pesar de que se mostró en contra. Todo lo que quedaba estaba frente a él y si perdía a los demás, claro que le afectaría, pero no podía vivir otra vez sin MingJue. 

En un impulso, se atrevió a acercarse, poniéndose de puntillas y tomó el cuello del mayor, uniendo sus labios con los ajenos. Aquella acción sorprendió al otro quién se separó para verlo confundido.

—¿A-Sang?

—Por favor... No digas nada...

Afortunadamente, no había nadie, ni siquiera las sirvientas pasaban, además era de noche, así que probablemente se fueron a sus casas y dejaron la cena lista para servir.

A different destination. [Niecest]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora