Capitulo 3

17 5 2
                                    



Luego de dejar a sus enamorados amigos en disputa por una inocente fantasía traviesa sus órdenes llegaron debidamente a su lugar por el mismísimo Jin, Somin podía observar los movimientos meticulosos que el mayor hacia, en especial con un pañuelo ...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Luego de dejar a sus enamorados amigos en disputa por una inocente fantasía traviesa sus órdenes llegaron debidamente a su lugar por el mismísimo Jin, Somin podía observar los movimientos meticulosos que el mayor hacia, en especial con un pañuelo de terciopelo rosa pálido que sostenía entre sus dedos. Se preguntaba la razón de cargar tal pedazo de tela, pues usualmente un camarero no llevaría un pañuelo de ese color para atender a sus clientes... Aunque conociendo a Jin sería muy probable.

—Resulta que el pay de limón es delicioso, no había probado antes bocado como este — dijo J.Seph irrumpiendo la distracción de Somin sobre la mesa de las chicas dónde Jin parloteaba y peleaba con Lisa por... ¿El pañuelo rosa?

Su predicción se hizo realidad... Estaba frente a un hombre apuesto y simpático cenando alegremente viendo meticulosamente cada una de sus facciones y sus nervios la traicionaban demasiado. Se sentía terrible. Realmente era urgente hablar de esas sensaciones con alguien conocido pero no quería averiguar qué era lo que pasaba por temor a que sus sospechas se hicieran realidad.

—Sí, todo lo que venden aquí es delicioso— aceptó Somin bebiendo su café con leche sorbo a sorbo.

J.Seph sonrió mirando de nuevo a sus amigos que al parecer ya se habían reconciliado y estaban teniendo un pequeño momento íntimo, definitivamente habían hecho bien en dejarlos solos y evitar ser el mal tercio.

—Entonces ¿Iremos mañana al cine?— preguntó el chico enarcando una ceja juguetón. Ansioso de ver la cara de Somin cuando se sorprenda de su increíble valentía.

—Es domingo, por supuesto. No me perderé el show de verte asustado— dijo la chica riendo.

—Te aseguro que no me asustare y si por cuestiones del destino ocurre lo contrario sabes lo que sucederá.

No quería recordarlo. La piel imitaba a una gallina cada vez que se imaginaba una mesa con ellos perfectamente arreglada dónde no había nadie más como en ese preciso instante pese a que había siete de sus amigos cerca de ellos y lamentablemente eso no contaba del todo como estar a solas.

—Pues yo te aseguro que te asustaras tanto que tendrás que invitarme a cenar— dijo estoicamente.

J.Seoh rió alegremente probando otro bocado de su pay de limón. Al segundo un chillido de alegría se escuchó de parte de Lisa en la mesa adyacente, ambos jóvenes voltearon curiosos observando cómo las cuatro chicas mantenían una mirada sorprendida alegre y Jin pasaba el pañuelo frente a sus ojos cuya tela contenía un destello bastante notorio.

—Eso será hermoso— se pudo distinguir una exclamación de Rose.

—Hizo una muy buena elección— dijo Jisoo.

Somin dio media vuelta sobre su silla y se acercó a las chicas levantándose.

— ¿Qué sucede chicas?— preguntó interesada notando la alegría que ellas transmitían.

Sensaciones peligrosas J.SODonde viven las historias. Descúbrelo ahora