Capitulo 7

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Estaba tocando apresuradamente la puerta de Lisa decidida a ayudarla con los preparativos, al menos eso le serviría para su dolor dándole la distracción perfecta que necesitaba para olvidarse solo unas horas de sus ganas de llorar a mar abierto

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Estaba tocando apresuradamente la puerta de Lisa decidida a ayudarla con los preparativos, al menos eso le serviría para su dolor dándole la distracción perfecta que necesitaba para olvidarse solo unas horas de sus ganas de llorar a mar abierto.

— Hola Lisa. ¿Cómo va todo? — dijo en cuanto diviso el rostro de su amiga desde el interior usando un delantal de cocina y unos guantes de la misma área.

— ¡Como un piquete en el trasero! — exclamó Lisa regresando a la cocina — ¡Definitivamente no estoy lista para casarme!

—Te ayudaré— se quitó su abrigo y lo dejo en el perchero cerca de la puerta dispuesta a ayudar.

Parecía que Lisa realmente se había esmerado en preparar todo para su prima. La sala entera y el comedor de su departamento de soltera estaban completamente adornados con globos brillantes metálicos en forma de corazón de diferentes colores pero había más rosas y negros que de otro color, más unas lindas serpentinas colgando del techo y algunas tiradas por el piso. Había una enorme bocina con luces de colores dónde se reproducía Big Bang, el grupo favorito de Lisa y además pudo notar que en el comedor reposaban unas atractivas botellas de alcohol. Debió imaginarlo desde que piso la casa.

— Perdona si llegué tarde, tenía también un asunto que resolver en el trabajo— se acercó a la cocina mientras se recogía el cabello en una coleta sacando la liga de su bolsillo.

— No importa, el trabajo es una gran recompensa pero es mejor cuando llega el pago ¿No crees? — admitió Lisa sacando una sonrisa en medio de sus gestos estresados.

Lisa casi terminaba de preparar los alimentos para el grupo de amigos que cabe decir; era casi enorme. Había probado la comida que tanto temía que fuera la causa de muerte de sus amigos, no estaba tan mal a decir verdad. Lisa estaba preocupándose por nada, de hecho.

— Lisa. Deja de martiriarte— dijo Somin acomodando los platos sobre la mesa—. Quedó bien... comestible al menos— dijo como último recurso para calmar a su amiga.

Un grito ruidoso de la menor atormentó sus oídos por unos segundos en señal de frustración. No había duda de que era idéntica Jiwoo.

— ¡Soy pésima en esto! Seguro y Matthew se quedara viudo antes de la boda.

Somin rodó los ojos con diversión por el comentario muy alegre de Lisa. Cómo dijo antes; ella solía ser un poquito dramática. Al mirar de nuevo a su amiga supuso que la menor ideaba un plan maquiavélico en cuanto miró su rostro con detenimiento deseando adivinar lo que pasaba por su cabecita traviesa.

— Ni se te ocurra pedir comida, Lisa— determinó seriamente.

— Es una forma de evitar que todos mueran infectados por mi culpa ¿No crees? — Somin enarcó una ceja con diversión combinado con miedo mientras comenzaba a sacar platos para los invitados sobre la barra de la cocina.

Sensaciones peligrosas J.SODonde viven las historias. Descúbrelo ahora