Hold Me Tight - Yoonmin

Capítulo 10

Inicialmente habían organizado sus actividades para tener una semana completa libres y dedicarse completamente a Jungkook.

Jimin se había dado cuenta que las palabras de su esposo estaban en lo correcto, vaya que cada día estaban aprendiendo algo nuevo.

Como que dejar solo a Jungkook en la sala era peligroso, las paredes llenas de dibujos del pequeño azabache lo comprobaba, pero no pudieron regañarlo severamente porque el mismo Jungkook fue quien les enseñó su obra de arte. Los había dibujado junto a él, bueno eso fue lo que les trato de explicar Jungkook y aunque Jimin solo podía ver figuras raras ahí, se sintió muy bien ver reflejado en ese dibujo que Jungkook se sentía feliz con ellos.

También aprendieron que a Jungkook no le gustaba bañarse, pero que si le permitían llevar alguno de sus juguetes, no se negaría al baño y que siempre después del baño, las energías del bebé por fin menguarían.

Adaptarse a la vida de padres era un proceso entretenido. A Jungkook le parecía gustar mucho su cuarto, él mismo había decidido que lo pintaran de verde y que lo decorarán con muchas figuras; pero solo le gustaba estar ahí para jugar porque en las noches siempre tomaba su peluche y caminaba a la habitación de Minnie para pedirle que durmieran juntos. Y así fue que, por comodidad, un día Yoongi le propuso a Jimin que durmieran en la misma habitación. Si de por sí tendrían que estar cambiando en la madrugada, ¿acaso no era mucho mejor ahorrarse la caminata en plena madrugada?

Adaptarse a dormir juntos no fue para nada desagradable, era un poco raro al principio pero la rutina fácilmente les ganó, cuando menos Jimin se dio cuenta ya estaban completamente adaptados a estar en la misma habitación y ver las cosas de ambos mezcladas por todas partes; así como, reconocer que Yooongi era por mucho el mejor organizado de los dos y quien siempre encontraba las cosas en el desastre que Jimin tenía. En los ratos en que Jungkook dormía en su cuna, era agradable tener conversaciones de cualquier tipo con Yoongi, a veces las conversaciones terminaban en pelea de almohadas y gracias al ruido siempre lograban despertar a Jungkook y que se les uniera al juego.

Se despertaban con el pequeño Jungkook encima de ellos, en ocasiones los abrazaba inconscientemente dormido o los despertaba porque le daba hambre.

-Yoongi...Yoongi...Yoon-Jimin estaba tratando de despertar a su esposo. Hoy Yoongi retomaría sus actividades y si no lo despertaba ahora, llegaría tarde a su trabajo.

-Mmnh-Yoongi solo se quejaba pero nada de que habría lo ojos. Sin querer Jimin se perdió en el semblante apacible del pelinegro, su hermosa piel blanca, sus pestañas cortas y el modo en cómo su pecho subía y bajaba en cada respiración. Los tres estaban todavía en la cama pero Jimin se había estirado lo suficiente para despertar a Yoongi.

Genial... bueno creo que mejor me levantaré a hacerle un café y algo para desayunar, a lo mejor el olor a comida lo despierta. Pensó Jimin.

Y así lo hizo, se levantó de la cama, simplemente se lavó la cara y fue a la cocina esperando hacer algo decente para el desayuno de su familia. Cuando estaba terminando todo sintió que alguien se recargaba en su espalda, no era Jungkook eso seguro, era...Yoongi, su esposo estaba atrás de él. Los nervios de Jimin estaban a tope y sus mejillas rojas a más no poder. Sentir el aliento de Yoongi tan cercano a su cuello y oreja era agradable y su mente le estaba jugando en contra imaginando que el pelinegro lo abrazaba por la espalda. Olvidenlo su mente no lo estaba engañando. ¡Yoongi lo estaba abrazando!

El cuerpo de Jimin inexplicablemente y ante todo pronóstico no se puso rígido, al contrario parecía derretirse en el abrazo. Yoongi no dijo nada, solo recargó su cabeza en el hombro de Jimin, disimuladamente aspirando su olor. El ambiente estaba cargado de una tensión inexplicable que podía romperse con una aguja y que impedía a Jimin respirar correctamente.