Decisiones. Jimin siempre se preocupó por planear su vida. Aunque, a veces los planes no salen a la perfección. Muestra de ello es que Jimin no planeaba casarse, pero terminó casado con Min Yoongi para subir de puesto.
Un matrimonio arreglado entre...
Jungkook ya no quería seguir durmiendo, llamaba a Jimin y gateaba por la cama buscando despertarlo.
—Jungkook...es muy temprano.
Jimin no había podido conciliar el sueño como hubiese querido, se despertó continuamente a lo largo de la noche simplemente para comprobar que el otro lado de la cama seguía vacío. Su cuerpo simplemente no quería levantarse, sin embargo, Jungkook pudo más que todas sus ganas de seguir tirado en la cama. Sabía que Jungkook solo le llamaría en caso de tener hambre, de lo contrario jugaría a esconderse entre las sábanas hasta que Yoongi o él lo atraparan para después preparar el desayuno. Pero, esta mañana se sentía diferente.
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Taehyung despertó envuelto por una frazada que Yoongi tuvo a bien llevar consigo para la noche de películas. Había olvidado que hasta la cosa más simple y rutinaria se disfrutaba de forma diferente a lado de Yoongi, sus bromas y comentarios podían ser graciosos para cualquier persona pero la risa que siempre preferiría escuchar era la de Yoongi, la atención que buscaría siempre sería la de Yoongi, siempre Yoongi.
Despertar a lado de él... Taehyung se preguntaba cuántas veces Jimin había tenido la oportunidad de ver la cara dormida de Yoongi, poder rozar tímidamente sus dedos sobre las mejillas pálidas del mismo, escuchar el tono profundo de su voz en las mañanas. Si Jimin no valoraba todo aquello, ¿por qué no permitía que alguien más sí lo hiciera? Sabía que hasta antes de la adopción de Jungkook a penas y convivían unos cuantos días al año. ¿Cómo es que Jimin era capaz de mantener alejado a Yoongi? ¿Por qué no escogió a alguien más para casarse?¿Por qué?
Taehyung se levantó del sofá para caminar hacia la cocina; no era momento de interrogantes, era momento de actuar.
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Jimin bajaba con el pequeño azabache envuelto en una manta ligera pero abrigadora, era una mañana un poco fría y Jimin no quería que Jungkook se enfermara; además, se veía adorable totalmente cubierto dejando a la vista únicamente sus ojos.
Al terminar de descender las escaleras, olores agradables invadieron los sentidos de Jungkook y los de Jimin también. Sin embargo, no fue lo único que captó la atención de Jimin.
