Sweetcheeks ♡̷̷ˎˊ˗ (En edición)

⛅️Epílogo⛅️

5 años después

— ¡Lucas!, ¿qué te dije antes de salir del auto? — Harry termina de bajarse para sostener a su hijo de la cintura haciendo que deje de correr, dando tiempo a que Louis los alcanzara.

— Que no debía correr, y que tendría que esperarte para cruzar hasta el parque, baba. — comenta el pequeño cabizbajo.

— Pudiste haber caído, debes hacerle caso a baba, Lucas. ¿Está bien?

— Está bien, baba. Lo siento mucho. — Harry se acerca para dar un suave beso sobre el cabello castaño y rizado de su pequeño hijo.

La familia da algunos cortos pasos más, adentrándose en el verdoso parque central.

Lucas da un vistazo a lo lejos, visualizando a Aiden sentado sobre el pasto, y de inmediato sale corriendo para acercarse a él. Harry se rinde, y lo deja ir.

— ¡Aiden! — el pequeño omega lo abraza por la espalda, sorprendiéndolo.

— Lucas. — el pequeño alfa se da la vuelta, devolviéndole un fuerte abrazo, mientras comienza a olfatear sus ricitos.

— ¿Podemos jugar?, por favorcito.

Aiden se levanta del pasto, sacudiendo su parte trasera asqueado, toma la pequeña mano de Lucas, y lo arrastra corriendo hasta el tobogán.

— Atrápame al final como siempre, no me dejes caer.

El pequeño alfa asiente, para posteriormente ubicarse frente al tobogán, esperando a que Lucas se deslizara.

Antes de que pueda atraparlo, otro alfa se atraviesa accidentalmente sorprendiéndose, pero de inmediato logra apañar al pequeño Lucas.

— Oh, hola. — las mejillas de Lucas se tornan de un color rosado intenso, agachando su cabecita, apenado.

Aiden al notar todo lo que había sucedido, miró con desagrado al alfa que era más bajito que él, y sin importarle sus gérmenes, lo empujó con la poca fuerza que tenía, haciendo que este cayera sentado sobre el suelo, no le importaba, pues éste había contaminado con sus sucias manos a su amigo.

Aiden se marcha del lugar a pasos rápidos, llegando con el entrecejo fruncido hasta donde estaba su madre. Louis estuvo observando la situación, así que decide llamarlo.

— Aiden, sígueme un momento, por favor.

El pequeño pelinegro se asusta de inmediato, de la familia Tomlinson la única persona que lograba intimidarle, era Louis, incluso cuando éste parecía ser el ángel más tierno.

Louis se sienta sobre un banco, alejado de su alfa y sus amigos,  el pequeño le sigue, quedándose de pie frente a él, esperando alguna palabra.

— Vi lo que ocurrió, ¿qué fue lo que te hizo molestar?

— Ese alfa tonto puso sus sucias manos sobre Lucas, y él se sonrojó, se supone que yo debía atraparlo.

— Aiden, no puedes empujar a todos los nuevos amigos que Lucas haga, no es la primera vez. Ustedes están juntos desde que él nació, siempre serás su amigo preferido.