31. Si uno no puede...

3.6K 484 76
                                    

Desde la guerra de clanes, los Uchiha y los Senju nunca se han llevado bien. Con la traición de Madara hacia Konoha y casi el asesinato de Hashirama, Tobirama creció en su desconfianza hacia sus enemigos jurados, observándolos prosperar en Konoha, la aldea que su hermano construyó con la ayuda de Madara y los Uzumaki. Siguiendo su instinto y la mentalidad que su padre le inculcó, así como las muertes de sus hermanos, obligó a los Uchiha a ser la Policía Militar de la aldea, guiando a los portadores del Sharingan a vivir en el centro de la aldea, rodeados por todos los clanes y siendo vigilados sin ellos saberlo, manteniendo cualquier movimiento de su lado bajo control y evitar cualquier derramamiento de sangre propiciado por los Uchiha. Senju Tobirama no era idiota. Prefería darles eso a los Uchiha y mantenerlos bajo control, que dejarlos libres por Konoha o el País del Fuego. No era el tonto de su hermano, que regaló los Bijū para mantener la paz lo que desembocó en las Tres Grandes Guerras Ninja, un sustento para la historia de los shinobi.

Por eso, que un Senju y un Uchiha se llevaran bien, era algo extraño y pocas veces visto. Solo Hashirama y Madara realmente se llevaron bien. Tal vez la relación entre Tobirama y Kagami podría ser otra como la relación entre el mayor Senju conocido y el mayor Uchiha conocido. No se podía saber con exactitud. Pero si fuera tomada como tal, solo habían sido dos relaciones buenas entre Senju y Uchiha en toda la historia de los shinobi desde el final de la Guerra de los Clanes. No había habido otra antes, pero si después.

Yamamoto realmente estaba sorprendido, observando el Yata no Kagami (Espejo de Yata) siendo usado por una figura humanoide de chakra rojo, intenso. Casi parecía estar hecha de las mismas llamas del infierno, o de la sangre de los pecadores. Una de las legendarias armas de los Susanoo de los Uchiha, estaba siendo usada por un joven moreno, de ojos rojos como la sangre mostrando el legendario Mangekyō Sharingan en un Uchiha real. Una capa negra con nubes rojas cubría su cuerpo, agitándose levemente por el viento.

Su jutsu fue detenido, barrido por el Susanoo solamente con el Yata no Kagami, dejando solamente las brasas, el humo y las cenizas de la marea de fuego. Yamamoto lo vio. Lo admiró. Sonrió mientras el Uchiha lentamente deshizo el torso de chakra del Susanoo.

Ningún saludo. Ninguna indicación. Senju y Uchiha se lanzaron hacia el frente, sin comunicación alguna, sin agradecimiento de parte del rubio Senju. Ambos adolescentes solamente se movieron. El Uchiha desenvainó su chokutō con un tirón y detuvo la espada de Yamamoto, la izquierda, mientras el Senju guiaba la Samehada contra el costado derecho del viejo Uzumaki.

El ex Uzukage bloqueó ambos tajos con sus dos espadas. Pero sintió la fuerza de los dos chicos. Se movió, deslizando la espada por la hoja del Uchiha e intentó decapitarlo. Solamente fue un clon de cuervos. Se centró en el Senju, bajando la Samehada hacia abajo. Vio como el rubio se movía, tomando la espada de roca contra él.

Clink

Yamamoto salió empujado hacia atrás por un tajo lleno de fuerza proveniente del Senju. Naruto se empujó hacia adelante, siguiendo al Uzumaki, moviendo ambas espadas, intercambiando tajos con su adversario generando un sonido constante de choque de metales, inundando los oídos de los animales.

Naruto saltó hacia atrás. Itachi exhaló una inmensa bola de fuego contra Yamamoto, quien la vio acercarse, quemando la hierba bajo ella. Movió la katana izquierda, rodeando la hoja con chakra de agua, cortando la espada en un solo movimiento, generando vapor que tapó su vista.

Slash

El viejo se movió, dejando pasar la pesada espada Samehada. Movió el brazo y bloqueó la pierna de Naruto, sintiendo la fuerza tras el golpe. Era un heredero digno de la fuerza de los Senju. Solo con detener el golpe, no le bastó para detener la fuerza tras el mismo. Fue empujado hacia atrás, dejando marcas de sus pies en el suelo.

A.N.B.UDonde viven las historias. Descúbrelo ahora