CAPITULO 17

3.8K 188 14
                                    

-¿Que haces aquí? -pregunto confundida y un poco molesta de que Shagen esté aquí. Él se acerca a mí, pero en si no me mira, sus ojos verde oliva solo están fijos en Emir. Él envuelve sus brazos alrededor de mi cintura, mis manos sobre su pecho tratan de alejarlo simuladamente pero él no cede. El mesa mi frente y luego la comisura de mis labios, trato de mantener en calma mí ya alterado corazón, pero al estar tan pegada él debe haberse dado cuenta de que su presencia altera mi sistema.

- Vine haberte- responde melosamente- me presentaras a Tu amigo- hace énfasis en lo último, frunzo el ceño.

-Bien, pero suéltame- niega con una sonrisa.

-No quiero- no digo nada, miro a Emir quien tiene un rostro bastante serio, y que en gran parte taladra con la mirada a mi marido.

-Emir, él es mi esposo Shagen, Shagen él es Emir, hermano de Sasu la prometida de Munim.

-Es un gusto conocerlo, pero ahora pienso robarle a Mi esposa, nos daría un momento a solas por favor- Emir no dice nada solo me mira dubitativo para luego marcharse.

Cuando lo veo desaparecer, golpe el pecho de Shagen con mis puños- ¡por qué has hecho eso!- le reclamo enojada.

-Y dejar que ese imbécil tocara lo que es mio, eso jamás... además tampoco iba a dejar que te besara o que te dijera que le gustas.

-No seas ridículo Shagen, te comportar como un estúpido idiota.

-Pero aun asi me amas- le doy un mazazo en la cabeza. El se ríe y se soba la parte atrás- cuando te pones violenta te vez muy tierna.

-Mira Shagen, te lo voy a preguntar por tercera vez ¿Qué demonios haces aquí!- el vuelve a rodear mi cuerpo, haciéndonos retroceder hasta hacerme chocar con el árbol. Sus ojos me miran hambrientos y deseosos.

-Vine a buscar a mi esposa, a la mujer e mi vida- niego nerviosamente.

-Yo jamás he sido...

-Ssh calla habibi, se que dije muchas cosas, pero estos días he pensado todo lo que ha estado pasando y me he dado de cuenta que mi amor por tu hermana aún sigue aquí- señala su corazón- pero cada día que pasa solo tú eres la que abruma mis pensamientos, yo te amo Nish pero no me había dado de cuenta de eso hasta ahora.

-No te creo- murmuro dolida, el me ha hecho mucho daño, y saber que aun sigue amando a mi hermana duele.

-No necesito que me creas. Tenemos suficiente tiempo como para que yo te lo demuestre.

-Quiero el divorcio Shagen, quiero que de una buena vez cortemos este lazo que nos une.

-No me divorciare de ti- sus ojos me miran oscuros, como si en cualquier momento su autocontrol explotaría.

-Si lo haras, padre me otorgara su abogado el redactara nuestro papeles de divorcio y nos libraremos de esto.

-Ya lo dije no pienso darte el divorcio Ranish, y esa es mi última palabra- murmura con dureza.

-Entonces iremos a tribunales- voy a salir de entre sus brazos pero se aferra más a mí. Estrujando su cuerpo con el mio.

-Sé que te falle, sé que comenzamos mal Nish pero dame otra oportunidad.

-Ya te he dado muchas- trato de no mirarlo a los ojos, porque sé que si lo hago caeré de nuevo en la tentación.

-Mírame- no lo hago- por favor mírame Nish, y ve mi mundo en mis ojos- sin poder soportarlo lo hago, miro sus ojos iluminados por la brillante luz de día- que es lo que vez- pregunta, mis manos se hacen puños.

-Veo, me veo en ellos- respondo con sinceridad.

-Por qué es así, solo tú, solo te puedo ver a ti, solo tu eres mi mundo- voy a replicar cuando sus labios se apoderan de los míos, nuestras lenguas se entre lazan entre si, ambos nos dejamos envolver, y yo volví a caer.

Cuando aprendería, cuando aprendería a no decir si a todo, pero ahora estaba allí, besándome con él, incapaz de negarle nada, por que el lo es todo para mi.

El amor es indulgente, se dice que el amor no tiene la culpa de las fallas de una relación, que los únicos culpables son las personas que no saben amar. Y yo... por mi parte no lo pienso perdonar, no pienso envolverme nuevamente entre sus brazos.

Pero como podría negarme si no soy yo quien manda ahora, si no mi corazón.

SHAGEN.

Cuando llegue, estuve a punto de matar a alguien, verla con ese hombre me hizo recordar lo fácil que puedo perderla si no actuó con sensatez, no podía entrar y golpearlo solo tenía que marcar mi territorio. Ella es mía, mía para protegerla y mantenerla a mi lado, mía para amarla y formar una enorme familia a su lado.

Es por eso que me comporte, me controle y marque mi territorio. Nish solo tiene que tener ojos para mí, para nadie mas. Ya me había librado de Munim ahora tenía que librarme de ese idiota y mantenerlo lo más alejado posible de mi mujer.

Ambos entramos a la casa de los señores Gambul, todos estaban sentados junto con los padres de Munim y mi suegro. Los ojos de todos se posaron en mi y en mi esposa, ambos estamos agarrados de la mano, pero la seriedad de Nish confirmaba que aun no me había perdonado.

-Por favor siéntense, pronto estará el almuerzo- doña Nina nos hizo sentarnos junto a ella, la mujer nos miraba con una enorme sonrisa, incluso palmeo mi mano varias veces con cariño.

Todo estaba un poco tenso en la cena, casi nadie hablo, y Munim parecía que quería huir.

-No sabía que no querías casarse- me acerco a él. Esta sentado en la terraza mirando el cielo estrellado de la noche.

-Padre lo ve conveniente, casarme traerá beneficios al jefe y a mi padre, tienen grandes empresas comerciales, y unir nuestras familias es lo adecuado.

-Pero no la quieres- aseguro, el me mira.

-Pero tu no quieres a mi prima asi que ya estamos.

-No es que no la quiera, incluso cuando me case con ella no la quería, solo lo hice por obligación, pero cuando empiezas a conocer a esa persona muchas cosas cambian.

-Pero tu amas a Amira...

-Es cierto, pero quizás ahora también tenga un gran espacio para mi esposa. Nish es una hermosa mujer, y los días que pase lejos de ella me parecieron eternos. Me estado envolviendo de ilusiones cuando tenía una mujer que podía llenar mi vida con realidades y no con puros sueños.

-Te has enamorado de ella...

-No sé cómo llamar a lo que siento por ella, lo único que si se es que no soportaría estar ni un día más si ella.

***

Cuando entro a la recamara de Nish la encuentro acurrucada aun lado de ella, suspiro. No ha querido hablarme desde que la bese, solo se ha mantenido callada y aislada.

Me quito la ropa, y quedo completamente desnudo, siempre suelo dormir en bóxer pero esta vez quiero sentir el cuerpo de Nish lo más cerca posible.

Me acuesto en la cama y me meto entre las sabanas, luego rodeo en cuerpo tenso de mi esposa y la atraigo hacia mi.

-Que... que estas haciendo- la pego mas a mi cuerpo, mi miembro ya estaba duro, reconociendo a su dueña.

-Solo quiero mantenerte entre mis brazos, te necesito, pero no te obligare, me conformo con solo tenerte pegadita a mi habibi.

-Sueles confundirme tanto- murmura casi en un hilo de voz.

-Ni yo mismo me entiendo- suelto un suspiro, ella poco a poco empieza a dormirse hasta caer en un profundo sueño. Beso su frente y la acurruco mejor entre mis brazos.

-Te amo... y no comprendo por qué hasta ahora me doy de cuenta.

"Mi amado corazón de cristal, tal vez no quedes igual, pero te pegare cada pedazo perdido".

HOLAA MIS AMORES, DEJA TUS VOTOS Y COMENTARIOS, BESITOS A TODAS... NOS VEMOS EN EL PROXIMO CAPITULO BYE.

JAMILATI " SAGA AMOR EN EL DESIERTO"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora