CAPITULO 31

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-Selim...

-Buen dia Ranish- responde el esposo de mi hermana.

-Disculpa por llamar a esta hora, pero me gustaría saber cómo está mi hermana.

-Desbastada, incluso no quiero hablar con nadie, ni siquiera conmigo- responde, la tristeza me envuelve, sabía lo feliz que estaba Ami por aquel bebé, y de que lo haya perdido debe haber sido duro para ella.

-Me gustaría hablar con ella, pudo hacerlo- pregunto.

-En este momento ella está dormida, desde anoche se ha mantenido en vela, y hasta ahora es que se ha dormido, no me gustaría despertarla, ella necesita descansar.

-Comprendo, quizás otro día- digo, paso mi mano por mi pecho que late con fuerza.

-Quizás, de igual forma le diré que has llamado- y sin más cuelga, me quedo unos minutos mirando el teléfono.

-Nish...- madre entra en la recamara, se sienta a mi lado, sus ojos me escanean antes de sonreírme un poco.

-Ustedes fueron a ver a Ami- ella niega.

-Selim no nos permitió ir, realmente él no me cae del todo bien, es demasiado posesivo y territorial- muerdo mi mejilla interna, suelto un leve sus piro.

-Y que dice padre de eso...

-A él tampoco le agrada, pero no podemos hacer nada, tu hermana no está casada con cualquier hombre, y tu padre a pesar de sus impulsos no se atrevería a faltarle el respeto al Jeque.

-Pero es su hija- ella asiente.

-Y jamás dejara de serlo, él está dispuesto ayudar a tu hermana si ella se lo pide, pero muy poco se le he permitido llamarnos o que la llamemos. Pero la última vez que la vimos, ella estaba muy feliz tu misma la viste.

-Si...- sonrió un poco- incluso me dijo que amaba a su marido.

-La extraño mucho sabes, desde que se fue ya nada es igual, desde que ustedes se fueron el silencio abunda en la casa.

-Madre...- toco mi vientre- crees que sea un castigo de Alláh perder nuestros bebés.

-No cariño, pero cada uno de nosotros tenemos un destino predestinado, yo por lo menos me negué mucho aceptarlo al principio, pero cuando pasa los días esa costumbre se vuelve en amor, y ese amor se fortalece cada día cuando el cariño, el afecto lo alimenta.

-Me gustaría tener un amor así como el de ustedes- ella sonríe.

-Ya lo tienes mi cielo, solo tienes que dejar de segarte por los obstáculos, si no dejas el pasado, jamás serás feliz mi Nisha preciosa- la abrazo, ella es la única que me entiende, la única que ha estado siempre atenta a todo, y dándome buenos consejos. Quizás sea cierto, si no dejo ir el pasado, él siempre me perseguirá, y nunca me dejara ser feliz. Pero ya no se trata del pasado, si no de las mentiras, y ya he luchado mucho por un amor perdido.

***

SHAGEN.

Me cambio de ropa, no hace más de media hora que Amir y Rhania se fueron a dormir, mientras nosotros nos preparamos ahora para ir a la cama. Me desvisto y me coloco un chándal gris, mientras que Nish está en el baño yo decido llamar a alguien antes.

Marco el número de Putifar, gerente textil de Glummer- buena noches señor Addel, ya el encargo ha sido enviado.

-Qué bueno, espero que todo vaya bien, esas telas han sido las más costosas en tejer, y las maquinarias han tenido un tanto de fallas, por lo que mande a comprar unas importadas de estados unidos.

-Los encargados de los tejidos de ceda aun no han terminado la última carga, pero para la semana que viene estarán lista para transportarlas a Polonia.

-Encárgate de todo, estaré ausente por varios días, ya que mi esposa esta en cinta.

-Comprendo señor, estaré en contacto con usted si pasa algún altercado- cuelgo. Me volteo y me encuentro con Nish, ella se seca su cabello con un paño, sus ojos me escudriñan de una manera bastante recelosa.

-¿Con quién hablabas?- pregunta, su tono de voz subió un céntimo, pero preferí mantenerme calmado.

-Hablaba con el gerente de la fábrica textil- respondo con sinceridad, ella se acerca a mí con el ceño fruncido.

-Por qué me mientes, dime la verdad Shagen, tú tienes una amante no es así- el no responde- de seguro te vas a ir a ver a la zorra de Soilan.

-De que hablas Nish, saben que yo jamás te encañari...

-Cállate, no quiero escucharte, te odio siempre te voy a odiar, me repugnas- grita, la sangre se me arremolina, y sin ni siquiera pensarlo la tomo del cuello y la acerco a mí. Enrollo un brazo en su pequeña cintura. Su cuerpo esta enfundado en una sexy pijama de satén.

-Te repugno- murmuro entre sus labios, los míos rosan los suyos, sus ojos grises cambian de color- de verdad te repugno Jamilati.

-¡Suéltame!- trata de separarse de mi pero no la dejo-¡Suéltame Shagen porque si no, no respondo.

-Que... que harás Nish, acaso gritaras- rio- o gemirás tan fuerte que incluso tus padres nos escucharan en su suite.

Su cuerpo se relaja un poco, pero aun así se resiste en doblegarse ante mí.

-Por favor...- niego, mi boca se desplaza por su mejilla, dándole cariñosos besos hasta llegar al lóbulo de su oreja- Shagen...- gime, la hago retroceder varios pasos hasta llegar a la cama.

-Solo disfruta- la acuesto en la cama con delicadeza, y bajo mis manos hasta el comienzo de su pijama purpura. Subo de ella hasta quitársela por completo. Beso su ombligo, la despojo de su braga y me deleito con su picante y dulce olor.

Paso mi lengua por su hendidura, doy pequeños círculos con mi dedo en su clítoris, dándole placer, oyéndola gritar de éxtasis.

Sus piernas se enrollan a través de mi cuello, dándome más accesibilidad a su húmeda y deliciosa plenitud.

Sus dedos se hunden en mi cabello y jalan de él con fuerza, meto un dedo en su cavidad, ella gimotea, se remueve como una hermosa cobra seduciendo a su víctima.

-Oh mi dulce Nish, no sabes lo mucho que me gustara tenerte entre mis brazos.

Mi único pecado fue amarte como te amo, mi único error fue dejarte ir de mi lado.

JAMILATI " SAGA AMOR EN EL DESIERTO"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora