Capítulo 15

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NICK

—Tu vecina me agrada.

El que Jasmine hubiera invitado a Valerie a cenar me sorprendió, mi hermana no es de relacionarse mucho con personas nuevas para ella. Y eso sólo significa una cosa, a Jasmine de verdad le agrada Valerie.

— ¿De verdad te agrada? —enarqué una ceja.

Ella asintió con la cabeza, su cabello que estaba amarrado en dos coletas se movió al tiempo que ella asentía.

—Es muy bonita, me recuerda a Taylor.

Sonreí de forma inconsciente; ahora no me resultaba mala idea que mi prima y mi rubia vecina sean amigas.

—Sí, es linda.

No me había percatado de las palabras que había dicho hasta que mi hermana tapó su boca con sus pequeñas manos y contenía reírse.

¡Oh vaya!

Después de terminar de ver una película de Disney que a Jasmine tanto le gusta, las acosté sobre su cama ya que se había quedado dormida casi al final de la película.

Me encargué de lavar, secar y guardar los platos que habíamos usado en la cena.

Desde que Valerie se fue, quise evitar de todas formar pensar en ella en su tacto de su mano con la mía.

No pude evitar sentir algo, pero no sabría identificar que había sido exactamente y por la forma en que sus ojos cafés se fijaban en el gris de los míos, ella sintió lo mismo.

No me está gustando nada la forma que mis pensamientos se centran ella desde la vez que estuvimos a centímetros de besarnos.

Sus labios finos se veían tan apetecibles que no podía apartar mi mirada de ellos, me gusta la forma en que su ceño se frunce cuando está confundida o no entiende la situación. El que sus pómulos sonrojados se tiñan cada que me le acerco me hace pensar que la pongo nerviosa.

Y todo esto se reduce a una pregunta: ¿Qué hubiera pasado si nos hubiéramos besado?

~*~

— ¡¡Yogurt!!

—Jasmine, llevamos dos botes de yogurt —levanté ambas bolsas del producto mencionado.

—No está demás un tercero —encogió los hombros y de todas formas tomó otro bote de yogurt y lo metió en el carrito de compras.

Mi hermana, al igual que mi madre, tiene una adicción al yogurt. Mi padre no la deja comer tal lácteo ya que en casa no se comía o tomaba productos derivados de la vaca debido a que él es intolerante a la lactosa.

¿Se imaginan una vida en la que no puedas ingerir ningún derivado de la lactosa?

Es por eso mismo que cuando Jasmine viene a mi apartamento trato de mantener botes de yogurt para que ella pueda comer cuánto quiera.

— ¿Crees que a tu vecina le guste el yogurt?

Dejé de leer los ingredientes de un jamón canadiense de dudosa procedencia al escuchar la pregunta de mi hermana.

Desde la cena con Valerie ayer, tal parece que mi hermana ha adquirido una pequeña obsesión por preguntar cosas sobre Valerie.

—No lo sé, Jazzy —respondí devolviendo el jamón en su lugar y tomando uno que ya había consumido anteriormente y que sé que no es de dudosa procedencia—. ¿Qué haces?

—Quiero llevarle un yogurt a la bonita chica rubia —respondió mientras metía un cuarto  bote de yogurt al carrito—, no te preocupes yo te lo pagaré después.

Perdidos En Las SombrasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora