Capítulo 27

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Tom Riddle miró bruscamente cuando Lucius Malfoy apareció repentinamente junto al escritorio en el que estaba sentado en la oficina del Ministerio una semana después.  Con una inclinación de cabeza al hombre para reconocer su presencia, se volvió hacia el espejo que estaba mirando sin decir una palabra.

"¿No te preocupa que Potter te pille con una de esas cosas?"  Preguntó Lucius.  "Estoy seguro de que sospecharía indebidamente de su propósito si lo hiciera".

"Harry no pensará nada de mí mirándome al espejo ya que no se da cuenta de su propósito", señaló Tom.  "Ya hemos logrado colocar nuestra pequeña red de espías en las casas de al menos una docena de sangre pura, y él no se da cuenta. Además, no objetaría la idea de vigilar al enemigo incluso si lo hiciera.  saber."

"Si eso es cierto, ¿por qué mantenerlo en la oscuridad al respecto?"  Señaló Lucius.

"Por el único motivo que podría considerar poco ético el uso de espejos para espiar a las personas y dejar que el gato salga de la bolsa, por así decirlo", explicó Tom.  "Entonces siempre existe la posibilidad de que él piense que no estamos siendo sinceros acerca de nuestras intenciones, y que chismorreemos con Kingsley. Después de todo, él fue puesto entre nosotros como niñera".

"¿Niñera?"  Lucius repitió divertido.  "Escuché que vas a necesitar uno de esos pronto."

"Ah, la noticia ha circulado, ¿verdad?"  preguntó con una sonrisa.  "Creo que la escritura se cumplió antes de los votos, de hecho".

"¿Papá orgulloso, Tom?"  Lucius se rió entre dientes.  "Eso es algo que nunca pensé que vería si me lo hubieras preguntado hace un año. Lord Voldemort está complacido con la perspectiva de su inminente paternidad."

Tom hizo una mueca levemente ante la referencia, luego se volvió para apartar el pequeño espejo que tenía en la mano.  "Potter debería estar aquí pronto", dijo.  "Hoy vamos a barrer al perro grande".

"¿De Verdad?"  Preguntó Lucius.  "Entonces, ¿vamos a visitar los Goyle?"

"Lo mismo", dijo asintiendo.  "Necesitaremos estar en la cima de nuestro juego para este".

"Quizás podríamos colocar espejos adicionales en el lugar, por si acaso," sugirió Lucius.

"Solo si tenemos la oportunidad, Lucius," respondió mientras se tocaba la mejilla pensativamente.  "Lo último que queremos ahora es que nos atrape el otro equipo. Quitarían nuestra red antes de que pudieras decir la barba de Merlín tres veces más rápido".

"Buenos días, caballeros", dijo Harry Potter mientras cruzaba la puerta y se quitaba la capa, colgándola de uno de los ganchos.  Lucius, que aún no había hecho lo mismo, dio un paso adelante y también se quitó el suyo.

"Hola, Potter," dijo con una sonrisa.  "Veo que faltan dos días para el gran evento. ¿Y cómo estás?"

"Oh, lo estoy haciendo muy bien, Lucius", dijo con una sonrisa.  "¿Has ido al joyero por el anillo como te pedí, Tom?"

"Sí, lo he hecho", dijo mientras seguía escribiendo con furia el informe que se suponía que debían haber entregado ayer.  "Elegiste bien a tu padrino de boda. No te defraudaré".

"Sí, lo parece", se rió Harry.  "No me digas, déjame adivinar. ¿Hermione te mantuvo despierto para otra noche de lectura?"

Tom hizo una mueca y escribió aún más rápido.  "Terminaré esto en un santiamén, y luego podremos irnos. Ustedes dos comiencen a planear cómo vamos a pasar a todos los guardias de Dolores en primer lugar mientras yo me acerco para darle esto a Kingsley."

En el espejo (TRADUCCIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora