Ella | JC | #1 [EDITANDO]

Capítulo 15 "Información"

Llegué justo a tiempo. Atravesé la reja y Ella estaba viendo cariñosamente la estatua. Con el rechinido se volteó y me sonrió.

Le sonreí de vuelta.

-Hola, Jos Orégano.

-Hola- me acerqué tímidamente.

Ella llevaba puesto unos pantalones de mezclilla y la misma chaqueta de la primera vez que la ví.

-Y... ¿Qué cuenta el cielo?

La miré, extrañado.

-¿Qué?

Sonrió.

-Eres una estrella ¿o no?

Me eche a reír.

-En ese caso tendrías que decírmelo tú.

Su risa cantarina inundó mis oídos.

-Por cierto, estuvieron geniales en la fiesta- me dijo levantando los pulgares.

-¿A si? ¡Pues casi lo arruino por tu culpa!

Ella levantó una ceja.

-¿Mi culpa?

-¡Si! ¡Estabas tan hermosa que me distraías!- le dije jugando.

-¡Usted, señor, es el un gran mentiroso!

Moví la cabeza. No podía creer que Ella no supiera lo hermosa que era.

Nos sentamos recargados en la estatua. El cielo se estaba tiñendo de rojo con el atardecer.

Miré de reojo a Mónica, que sonreía perdida en sus pensamientos. Luego abrió mucho los ojos y me miró.

-¡TENGO UNA IDEA!- gritó emocionada. Luego se tapó la boca cuando se dio cuenta que habia subido el tono- Juguemos a las 20 preguntas.

-¿Qué?

-Si, las 20 preguntas. Yo te hago 20 y tu 20 y tenemos que responder.

-¿Cualquier pregunta?

Torció un poco la boca.

-Hasta un límite, si.

Me encanta.

-Ok, tu empiezas...

Se acomodó en su lugar y sonrió. No había nadie a nuestro alrededor.

-Ok. ¿Cuál es tu nombre completo?

Una sonrisa torcida se forma en mi cara.

-¿Enserio?

-Solo contesta.

-José Miguel Canela Rivera.

-Ok, tu turno.

-¿Cuál es TÚ nombre completo?

-No se vale la misma.

-Ok, pero contesta esta.

Se rio.

-Mónica Gisela Mondragón Lazcano.

Ahora soy yo el que levantó las cejas.

-¿Gisela?

Me miró con fingida molestia.

-Al menos yo no me apellido "Canela"

-Touche.

-Siguiente pregunta. ¿Tienes hermanos o hermanas?

-Si, tengo una hermana.

-Ok, tu turno.

El juego continuó lo que me parecieron horas. Salimos del jardín de Peter y nos fuimos a unos columpios. Le seguí preguntando mientras la empujaba.

Entonces me vino una pregunta a la mente y antes de poder detenerla la hice.

-¿Primer beso?

Estaba en el aire y de pronto salto del columpio. Corrí hacia ella para ver si se haba hecho daño, pero cayó agilmente y me miró sorprendida. No le agradó la pregunta.

-No tienes que contestar...

-No, no, está bien, sólo me sorprendiste. Dijimos que teníamos que contestar- se quedó callado un momento, como escogiendo sus palabras. Luego habló.

-Había un chico. Hijo de la mejor amiga de mi madre. Iba muy seguido a casa y yo lo miraba de lejos- bajo la cabeza- Un día me preguntó si quería ir al parque y accedí. Platicamos un rato y entonces me besó.

Una sonrisa apareció en sus labios con el recuerdo. Entonces se evaporó tan rápido como había aparecido.

-Al otro día me enteré que tenía novia.

No supe que decir, me sentí un tonto por preguntar.

Unas gotas comenzaron a caer del cielo, ya oscuro.

-Será mejor que me vaya. O me meteré en problemas- me dijo.

Comenzó a caminar hacia la acera.

-Espera- la llamé.

Regresó a mi lado y fijó sus enormes ojos en los míos.

Yo los cerré.

-Por favor, no me odies...

-¿Por qué?

-Por intentar darte un mejor primer beso- Entonces la agarré de la cintura y la jalé hacia mi.

Lo hice por instinto, sin pensar. Antes de que pudiera detenerme o yo pudiera cambiar de opinión.

Sus labios estaban fríos debajo de los míos.

La energía que sentí cuando me tomó las manos por primera vez, no era nada comparado con esto.

Se separó unos centímetros.

-Esto está mal- me dijo recargando las manos en mis hombros.

Sonreí.

-Definitivamente.

Y la volví a besar.