Seokjin había llegado a su lado hace un par de minutos, para poder observar juntos la Pisada de Uva. Taehyung siempre creyó que aquella tradición merecía un nombre más original y simbólico, un nombre que se grabara a fuego en la cabeza de los espectadores y fuese único, pero simplemente se llamaba así, tal cual lo que era.
El ambiente era cálido y agradable, las conversaciones fluían y los inversionistas se mostraban abiertos a la idea de apoyar su viñedo. No podía encontrarse más orgulloso.
Por el rabillo del ojo, había visto a Jimin caminar fuera de la carpa con la compañía de algunos meseros. Frunció el ceño con intriga, pero una beta había reclamado su atención casi de inmediato, impidiéndole a su cabeza darle vueltas al asunto.
Justo ahora observaba de pie el inicio de la tradición, con varias personas vestidas de traje y costosos vestidos largos detrás de él.
Este punto de la Vendimia era moldeado según los gustos y costumbres de cada región, pero los puntos principales seguían siendo los mismos. La mayor parte de la producción se destinaba para que este proceso fuera mecanizado, porque así era mucho más rápido. Mientras tanto, la pequeña parte que se utilizaba en la Vendimia se recogía en un par de barricas para así comenzar con el proceso.
La música cambió a una más lenta y tranquila cuando la pareja que había escogido ese año fue entrando poco a poco en el lagar del centro. El proceso era sencillo: pisar la uva desde el centro hasta las orillas siguiendo el ritmo de la música.
Habían tenido cuidado con asegurarse de que los pies de quienes aplastarían las uvas se encontraran pulcros al máximo, pues lo último que deseaban era obtener un vino de mala calidad.
Ambas se sostuvieron de un largo tubo de madera que estaba en la mitad del lagar y comenzaron su labor. En unos minutos encontraron el ritmo que seguir, por lo que daban varias vueltas en pequeños brinquitos, sosteniendo con su mano libre sus largas faldas blancas que poco a poco se tornaban rojo oscuro en la zona inferior.
A lo lejos, el Sol desaparecía detrás de las montañas, pintando el cielo de hermosos colores cálidos como el rosa, naranja y rojo.
Jihyo, quien se encontraba justo a su lado, le sonrió con orgullo, a lo que devolvió el gesto con entusiasmo.
— Esto está siendo un éxito, Tae. Te felicito. —Halagó Jihyo. Taehyung le mostró una suave sonrisa tímida agradeciendo en silencio.
Jin se acercó discretamente a su oreja poco después.
— ¿Dónde está Irina? —Preguntó.
— Creo que había dicho que se iría a retocar el maquillaje.
— ¿Y hace cuanto fue eso?
Taehyung frunció el ceño, apartando su mirada del espectáculo y llevándola al reloj de su muñeca, era poco más de las ocho de la noche por lo que la molesta alfa llevaba casi media hora sin dar señales de vida.
— Hace treinta minutos. —Contestó dirigiéndole la mirada. Jin la respondió con un ceño fruncido.
Jin se apartó del omega después de eso, buscando a la insufrible mujer, siendo conscientes de que su silencio era una mala señal.
Todos estaban enfrascados en el espectáculo o admirando las botellas qué se exhibían a su alrededor.
Debido a que estaba viendo a sus alrededores, no pudo evitar toparse con alguien enfrente. Se disculpó brevemente con el que parecía ser un alfa con olor a menta y café antes de disponerse a seguir con su búsqueda.
Pero la chica rubia que acompañaba al alfa llamó su atención.
— Disculpa, ¿Sabes qué es lo que está sucediendo aquí? —Preguntó, Jin la observó de arriba a abajo rápidamente con una ceja alzada.
ESTÁS LEYENDO
Vendimia || KookV
Fanfiction| Finalizada | Jeon Jungkook, acostumbrado a una vida sin conocer el cansancio y el esfuerzo, creció en el seno de una familia poderosa que le proporcionaba todo lo necesario para alcanzar sus metas. Como próximo líder de una de las cadenas de resta...