El profe sexy.

Capitulo XXIII: Visita inesperada.

Luego de salir del salón nos vamos a un lugar alejado para que los curiosos de siempre no nos escuchen, una vez que estamos en un lugar seguro me dejo caer sentada en el suelo y dejo salir un pesado suspiro; las ganas de gritar e ir a partirle la cara a Thais son inmensas pero se que solo lograría que me suspendan o que hasta me expulsen.

-Oye,- llama mi atención sentándose a mi lado- no dejes que ella te controle de esta manera.

-Estoy muy enojada Samuel,- me giro para verlo a la cara- ¿te diste cuesta de la forma en la que te toco?- llevo mi cabeza a mis manos y enredo mis cabellos entre los dedos.

Siento que me rodea con los brazos y me atrae contra su cálido cuerpo, dejo que me abrase y descubro que aqui es donde me gusta estar: en sus brazos.

-Tenemos que ser fuertes, ella sabe mucho y nos puede perjudicar.- dice acariciando mis cabellos.

Me separo de él lo suficiente para verle la cara.

-Hoy en la entrada su primo, Felix, me dijo que escucho hablar a Thais y a Bryon sobre nosotros. Me dijo que tengamos cuidado, ella es muy caprichosa y no parara hasta tener lo que busca.

-Tu sabes bien que yo no quiero nada con ella.- me dice muy serio.

Yo me derrito con esas palabras y le doy un beso, no feroz y violento sino uno tranquilo, tierno. Los dos disfrutamos de él a nuestra manera y nos dejamos llevar por ello.

Me separo porque se que si no paramos terminaremos montando una escena para adultos en plena universidad.

-Yo confió en ti.- digo dándole pequeños toques en sus labios con los mios.

-Eso me deja mas tranquilo.- me sonríe.

-Tengo que pensar algún plan para que Thais deje de molestarnos.

-Trata que ese plan no ponga en peligro tu puesto aquí.- se levanta y me ayuda a mi a hacerlo también.

-No te preocupes por eso.- le sonrió y, antes de salir de nuestro escondite, le doy un ultimo beso.

[...]

La clase de danza esta a punto de comenzar y yo estoy mas que exhausta, la clase de Donovan me provoco dolor de cabeza y el profesor Hipnos estuvo muy hablador es la clase. 

Entro al gimnasio y veo a la profesora Diva preparando los materiales para la clase de hoy.

-¡¡Mi niña!!- grita apenas me ve.

-Hola profesora.- la saludo cuando llego donde esta ella.

-Por favor llámame Diva,- me dice con una sonrisa- ¿Como esta tu hermano?

-Por suerte ya esta mejor, hoy le dan el alta.

-Me alegro mucho.- dice con verdadera alegría.- Estuve pensando estos días y eh decidido nombrarte mi ayudante, tu dotes en la danza son perfectos y quiero que me ayudes en las clases; ¿Te agrada la idea?

-¿En serio?, wow es fantástica, claro que si.- es fantástico que confié en mi de esa manera.

-¡Perfecto!- exclama- Hoy practicaremos con cintas.

-De acuerdo.

Media hora después estoy yo frente a diez chicas a punto de mostrarles la coreografía que practique antes de que comience la clase.

La canción Love me like you do de Elie Goulding comienza a sonar y dejo que mi cuerpo se exprese.

A medida que la canción va tomando ritmo los movimientos de mi mano con la cinta siguen el ritmo, pequeños saltos seguidos de ágiles movimientos con los brazos van creando la coreografía que tengo en la mente. Canto despacio la canción sintiendo que expresa todo lo que siento en este momento, mis pies se mueven al compás de la musica y la cinta da vueltas a mi alrededor, forma bucles por el aire y se mueve con elegancia siguiendo mis movimiento. La canción logra atraparme y la canto sintiendo la letra, las cosas que pasan por mi corazón las dejo expuestas con los movimientos de mi cuerpo. La cinta me sigue obediente y deja a las chica con la boca abierta, algunos pasos de ballet también los incorporo a mi demostración, la adrenalina circula por mi cuerpo y ayuda a moverme con mejor precisión. La canción llega a su fin y las chicas y profesora aplauden mi baile.