30. Jamás te engañaría

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ISCO

Al final nos hemos tenido que echar un rato la siesta. 5 horas y media de viaje en coche le dejan a uno reventado. Yo es que no podía mantener los ojos mucho rato abiertos.  Últimamente cuando voy a Málaga siempre voy en avión, así que he notado bastante el viaje en coche. Eso y tener que aguantar a los cuñados peleándose por conducir.  Me hubiera encantado hablar con Andrea, pero no quiere ni que me acerque, así que por ahora respeto su decisión. Pero se vaya a creer que voy a aguantar así por más tiempo. He venido con un propósito y es recuperarla. Por lo menos no ha puesto problemas para que estuviera con Erica. Creí que tampoco querría que me acercara a ella. Me alegro que no haya sido así porque me hacía falta mi niña. Esta casa es enorme. Tiene mogollón de habitaciones además de un salón muy grande con chimenea. Se pierde uno aquí. Mario nos ha contado que era un antiguo pazo gallego y lo reformó entero. Me levanto y voy al comedor. Veo allí a Marcos y a Marco con Mario, pero no a las chicas.

- Hola –les saludo- ¿y las chicas?

- En la playa –contesta Marco- no nos han esperado, pasan de nosotros...

- Marquito, no te quejes que hemos escuchado como Claudia pasaba de ti en la siesta... -le dice Marcos poniéndose el mallorquín como un tomate

- Pues venga, a la playa –les digo volviendo al cuarto para coger las cosas para irnos.

Mario nos lleva hasta la playa donde van. Está muy cerca y vamos andando. Por el camino nos cuenta que está saliendo con Leni y que en unos días vendrá para estar con él. Así que nos amenaza con que tenemos que largarnos cuando ella venga. Nos reímos, pero sé que lo dice en serio. Llegamos a la playa y me quedo sorprendido de lo bonita que es. La arena es muy fina y el agua se ve muy transparente. Veo a las chicas que están debajo de una carpa. Nos acercamos y se me seca la boca. Andrea está encima de una toalla con sus gafas de sol. Maya le está haciendo una foto. Lleva un bikini de lo más sugerente y yo sólo puedo pensar en tener su cuerpo debajo del mío. Ella me mira y se baja las gafas de sol.

 Ella me mira y se baja las gafas de sol

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¿Te gusta lo que ves Francisco? –me pregunta juguetona. Yo sólo puedo asentir- pues lo verás y no lo tocarás

Andrea se ríe de mi y se levanta. Me merezco todo lo que me diga. No quiero perderla, no estoy dispuesto a hacerlo. Si ya la hubiera perdido no estaría así conmigo, estaría peor. Ni me hablaría, así que algo de esperanza tengo.  Andrea se va hasta la orilla dejando a Erica jugando con Marcos. Yo la sigo con la mirada y no puedo evitar mirarle el culo y lo bien que le queda el bikini. Estoy salivando, lo admito. Llevo tantos días sin estar con ella que el cuerpo entero reacciona cuando está cerca de ella

- Vas a tener que hacer algo más que mirarla –me dice Claudia. Yo suspiro fuerte y me siento en una hamaca

- Lo sé -respondo

- No, no lo sabes –me dice Maya- después de todo lo que ha pasado con Borja, ¿Cómo se te ocurre Isco? ¿en que estabas pensando?

- No paso nada con Sara, ella sólo vino a hablar conmigo...y...

Te esperé toda una vida (Cross 3)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora