Isco Alarcon siempre ha deseado formar una familia como la que tienen el resto de sus amigos. Desengañado por su última relación se promete a si mismo que la próxima persona que pase por su vida, será la definitiva, la futura madre de sus hijos.
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El piso que tiene Mario en la Gran Vía es enorme. Tanto que aquí hay un montón de gente para ver los Reyes. Aparte de sus hermanos con sus parejas, hay algunos amigos. Esto parece más una fiesta fin de navidad que otra cosa. Estoy sentada en uno de los enormes sofás del comedor. Erica está dormida en el dormitorio de Mario. De vez en cuando voy a verla para asegurarme de que esté bien. Mario se acerca a mi con una copa en su mano. Me la ofrece pero yo la rechazo.
- Es Coca-Cola - me dice sentándose a mi lado
- Gracias, pero no me apetece
- Andrea, ¿Te pasa algo?
- No, ¿por?
- Porque tu cuerpo está aquí pero tu mente está en otro sitio, llevas todo el día así
- Lo siento, de verdad, no sé lo que me pasa. Quizás tienes razón y tengo la cabeza en otro sitio...
-... o en otra persona... - miro a Mario sorprendida mientras él le da un sorbo a su bebida y se ríe
- ¿Tanto se me nota?
- Mucho... pero más se noto en Nochevieja...
- ¿Que? ¿En serio? - le pregunto incrédula
- Si si. Mira, se me da muy bien leer a las personas, quizás porque llevo tantos años actuando que siempre me fijo en todo y estoy pendiente de los pequeños detalles... Y en Nochevieja erais un libro abierto...
- ¿Erais? - le pregunto sorprendida
- Si, Isco y tú... os mirabais con disimulo sin que el otro se diera cuenta y estuvisteis toda la noche pendiente de lo que hacíais... fue muy divertido ver como desviabais las miradas para que nadie se diera cuenta...
- ¡Joder Mario! No se te pasa ni una...
- ¿Entonces, te gusta Isco?
- Si - es la primera vez que lo digo en voz alta, que admito que me gusta
- ¿Y entonces?
- Por ahora nada. Yo soy madre soltera y por ahora me dedico exclusivamente a mi hija y nada más... Isco me gusta pero ya está
- Ay Andrea, te engañas a ti misma ¿Sabes? Creo que ese tío bebe los vientos por ti y le importa una mierda que seas madre soltera, es más, adora a tu hija, así que si tanto te gusta mueve el culo y espabila o va a llegar otra que te lo quite...
- Eso está muy bien... ¿y que hago listo? Me lanzó a por él como una desesperada...
- No guapa, sé tú misma que es lo que a él le gusta... y la, próxima vez en vez de quedar conmigo te vas con él... eso para empezar
A la mañana siguiente
Las palabras de Mario resonaban en mi cabeza una y otra vez. Tuvimos una charla sobre el amor bastante interesante. Ahora entiendo porque se lleva tan bien con Maya, debería ser psicólogo en vez de actor.
