Isco Alarcon siempre ha deseado formar una familia como la que tienen el resto de sus amigos. Desengañado por su última relación se promete a si mismo que la próxima persona que pase por su vida, será la definitiva, la futura madre de sus hijos.
An...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Miro y remiro a Andrea. Y lo que veo me gusta tanto que estoy pensando seriamente no salir a ningún sitio, quedarnos aquí y hacerle el amor toda la noche. Lleva puesto un vestido que es para que me de un infarto. Si es que me tiene ya duro desde que la ví en ropa interior. Está sentada en la cama. Se está poniendo los zapatos y se ríe.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
- ¿De que te ríes bruja? -le pregunto apoyado en el marco de la puerta sin poder dejar de mirarla
- ¿Yo? Pues de que va a ser. Que me estás desnudando con la mirada -Andrea se da la vuelta y sólo puedo fijarme en sus labios rojos
- Si, con la mirada te desnudaba yo...
- Oye, que si no quieres ir a cenar, yo me quito el vestido y me pongo el pijama... -me dice poniéndose de pie y provocándome.
- Mira preciosa -me acerco a ella y pongo mis manos en su cintura- te voy a llevar a cenar porque estás buenísima con este vestido y para que todo el mundo vea el pedazo de mujer que tiene Isco Alarcón...
- Ah, vale...que tú lo que quieres es lucirme... - Andrea me mira haciendo como que está desilusionada
- Oh si, que todo el mundo vea que eres mía y de nadie más. Que se mueran de envidia, sobre todo más de uno de por aquí en quien estoy pensando...
- ¿Tú también tienes cuentas pendientes?
- Algunas preciosa, algunas...pero da igual. Vamos a cenar, luego vamos a ir a tomarnos algo y después volvemos a casa y te voy a hacer el amor toda la noche...
- Huumm, suena muy bien Francisco -Andrea me mira sonriente y me besa. Sus labios saben a fresa. Me separo y la miro
- Tus labios saben a fresa
- Lo sé -me dice riéndose- es una barra de labios con sabor, ¿te gusta?
- No sé, a ver déjame que pruebe otra vez -vuelvo a besarla esta vez más profundo, haciendo que mi lengua busque la suya. Andrea pone sus manos en mi cuello y me acerca más a ella- si, sabe a fresa. Anda, vámonos ya, y cariño, que no tenemos prisa esta noche, así que relájate y disfruta...
