Izuku midoriya, estudiante de 1º año en la UA, no destaca en lo absoluto, y tampoco intenta sobresalir por el simple echo de que no quiere, ¿por que?, desde su primer año simplemente a sido el objeto de las mujeres, un simple muñeco, marioneta, jugu...
Izuku despertó, aún tenía a fuyumi entre sus brazos, le dio un beso en la frente y se levantó.
Se dirigió al baño y tomó una larga ducha, dejando que el agua caliente le quite los pensamientos que tenía en su mente hasta ese momento.
Se vistió y salió un momento al patio para fumar un cigarrillo.
Miró su muñeca carente de reloj, esa situación le estaba colmando la paciencia, miró su teléfono, eran las 9 am.
Terminó su cigarrillo y entró nuevamente para cepillarse los dientes y preparar el desayuno.
Aunque, cuándo entró, fuyumi ya estaba preparándolo.
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Fuyumi: buenos días Izuku.
Izuku: buenos días.... ¿te despertaste hace mucho?.
Fuyumi: cuando sentí que saliste de la cama... ¿te puedo preguntar algo?.
Izuku: dime.
Fuyumi: ¿por que estabas fumando?.
Izuku: ¿te molesta?.
Fuyumi: no es eso.... solo, me preocupo por ti.
Izuku: es un viejo hábito, y no te preocupes, gracias a mi regeneración no puede dañar mis pulmones.
Fuyumi: está bien.
Izuku fue hasta el baño y se lavó los dientes dos veces, volvió a la cocina y abrasó a fuyumi por la espalda.
Izuku: ¿por que eres tan linda?.
Fuyumi: eh?!, y-yo, yo no...
Izuku: shhh, sabes que lo eres y te aprovechas de eso.
Este la tomó del mentón y la beso, la menta en su boca y los frescos labios de fuyumi causaron una intensa sensación helada, y aunque fuyumi ardía por la vergüenza, aun así correspondía de forma tímida y temerosa para deleite de Izuku.
Este se separó y la dejó en paz para que termine de preparar el desayuno.
El peliverde se fue al sofá para esperar.
Un rechoncho cachorro bajó lentamente las escaleras para no tropezar y caer, para saltar en el último escalón y correr a morder las piernas de Izuku.
Eri bajo a los pocos minutos, aún tenía su pijama puesta, camino adormilada hasta la alacena y buscó la comida de tayson, echo las croquetas en un tazón y lo puso en el suelo para que el cachorro se alimente.
Eri: *bostezo* buenos días papi.
Izuku: buenos días enana, ¿dormiste bien?.
Eri: si, aunque el fresco tayson no dejaba de roncar.
Izuku: bueno, tal ves esta muy gordito.
Eri: si, pesa mucho cuando intento llevarlo en brazos.
Fuyumi: eri, puedes ir a cambiarte, el desayuno ya está listo.
