TOXIC || derek shepherd

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Siete horas antes...

No me puedo mover, no hay nadie en la calle y no está lo suficiente cerca como para que me vean los cuatro médicos que habrá ahora por recepción.

— ¡Derek!— Lo llamo, se levanta como puede, creo que le he hecho mucho daño.— ¡Ayúdame!— Le grito, viene hacia mi corriendo, aunque las muecas de su cara me dice que le duele.— Ves a dentro.

— Tu padre...— Lo miro a los ojos.— Vale, si, voy.— Entra mientras intento despertar a Mark.

— Vamos, no puedes dejar a Lexie sola, ahora.

Se está muriendo, si no lo está ya, hay mucha sangre, no se exactamente la cantidad, pero es mucha.

— Owen ya viene.

Me dice llegando con enfermeras y yendo a ayudar a mi padre. Junto con las enfermeras y enfermeros subimos a Mark a la camilla y lo entramos, pero cuando entro me doy cuenta que sale otra, esa es para mi padre, ojalá se muera. No suelto en ningún momento mi abrigo, no dejo de hacer presión, llegamos a trauma uno donde nos espera.

— ¿Qué ha pasado, Kendall?— Me pregunta apartándome, Avery hace lo que yo estaba haciendo.

— Nuestro padre le ha apuñalado, no sé cuantas veces, ha perdida mucha sangre.— Le digo.

— Tres unidades de cero negativo.

— Es A positivo.— Les digo.

— Pues de A positivo.— Rectifica.— Kendall, sal de aquí.— Niego.— Vete, busca a Lexie y que no se acerque, ir a la sala de espera.— Me mantengo firme y no me muevo.— Avery, sácala.— A Jackson le sustituye una enfermera y viene hacia mi.

— Ni se te ocurra, Avery.— Le digo firme, pero me coge y me saca de la sala.— ¡Imbécil!

Ahora...

Lexie se ha quedado dormida en la silla, no ha salido nadie ha decir nada, y no nos dejan están en ninguna otra parte que no sea está, piensan que si nos dejan aquí no nos preocuparemos tanto, pero estoy a anda de un ataque de ansiedad. Llevo siete horas llorando, no se como no me he desmayado por deshidratación.

— ¿No sabéis nada?— Levanto la cabeza y miro a Derek, niego.— Ven aquí.— Me tiende la mano y se la cojo, me levanta y me abraza. Me molesta admitirlo, pero era lo que necesitaba, era a él a quien necesitaba ahora mismo. Me acaricia el pelo mientras le empapo el pijama sanitario. ¿Pijama sanitario?

— ¿Has operado a mi padre?— Le pregunto separándome, asiente y me aparto.

— Vamos, Kend, era lo que debía hacer.

— Ese hombre ha apuñalado a mi hermano, no se merece vivir mientras él está en una mesa intentando sobrevivir.

— ¿Lo has empujado por eso?— Pregunta.

— Lo he empujado para quitárselo de encima a Mark, ha caído mal.— Asiente levemente.

— Yo también le odio, pequeña, pero soy medico, tengo que salvarle la vida sin pensar que que ha hecho o quien es esa persona.— Me siento alejada de Lexie para no despertarla y él lo hace a mi lado.— Sabes que tenia que hacerlo.

— Podría haberlo operado Nelson.— Le digo y niega.

— Mark va ha estar bien ¿lo sabes no?— Lo miro y mi labio tiembla.— Ey... Mi niña...— Acaricia mi mejilla y yo lo abrazo.— Todo estará bien...— No sé como pero acabo sentada en sus piernas abraza a él, mientras su mano acaricia mi pelo con delicadeza.

— Nunca nada está bien...— Murmuro contra su cuello.— Mi vida es una mierda... Nunca nada me sale bien.— Me separo y me mira a los ojos.— Lo estropeo todo, todo se acaba yendo a la mierda y todos se van.

— Yo jamás me he ido.

Tiene razón él nunca se ha ido, siempre he sido yo quien se ha ido y puede que haya sido de mis peores decisiones.