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CRISTOPHER CROSS

Ellie y Alexander estaban atentos a la historia que estaba por relatar, me debatía internamente entre si decirles la verdad o inventarles algo. De todas formas Ellie ya tenia mucho con cuidar a su novio, y Alexander apenas podía con su enfermedad.

—Hombre cuéntanos, que no tenemos todo el día—Alexander me saco de mi transe, aun me dolía verlo con Ellie.

—¡Uff!, es difícil pero aquí vamos—Respire profundo y me decidí a contar mi mentira disfrazada de verdad—Como saben mi padre es un hombre de negocios como ya les dije, antes de conocer a mi madre y antes de tenerme a mi, él ya estaba casado con el amor de su vida, tuvieron un niño Ethan Cross, hasta lo que se mi padre estaba viviendo un cuento de hadas, ya saben vida perfecta, familia perfecta e hijo perfecto. Pero después no se que paso con su anterior esposa y su hijo, Cuando tenia 8 años me entere que mi madre en realidad no era mi madre, pero la amo a pesar de todo. El punto es que me buscan los amigos de mi padre ya que bueno el para tener esa familia "perfecta", tuvo que meterse en muchos trabajos uno de esos fue en traficar y volvemos a que se quedo endeudado y yo tengo que pagar los platos rotos, fin.

Ellie y Alexander tenían una cara de confusión, ni yo había entendido mi relato, pero lo que importaba era hacérselos creer para que salieran ilesos de toda la mierda de mi pasado.

—No entendí ni un carajo—Ellie y Alex dijeron al unísono

—Me siguen porque quieren que les pague, así de fácil.

Había dejado de mentir desde hace siete meses y volverlo hacer era como ir al baño sin papel, era una situación difícil.

—¿ósea que si estabas diciendo la verdad?—Pregunto Ellie

—Sí, pero no me creíste.

—Lo siento, pero no parecía real a comparación de lo que acabas de decir, ahora mi pregunta es, ¿Cómo es que saldremos de esta tienda o mejor dicho como sacaremos a Cross? —Ellie frunció el ceño, amaba todo de ella.

Los tres nos miramos y hubo un silencio por varios minutos, ya me estaba arrepintiendo de mentir.

¿Y si todo salía mal?

—Bueno, esta claro que tenemos que sacar de este lugar a Cross y a nosotros, primero Ellie, dame tu sudadera—Ellie se puso de pie junto con Alexander y este espero la sudadera gris de ella. —Cross Ambos nos meteremos a un vestidor diferente, te quitaras tu ropa y se la pasaras a Ellie, después te daré la mía.

Me dirigí al vestidor y rápidamente me quite la ropa.

—Toma Cross—Ellie me paso la ropa de Alexander por la parte de abajo de la puerta del vestidor, al mismo tiempo que le daba la mía.

Espero que me quede.

Sali del vestidor, los pantalones me quedaban bien, aunque la playera estaba algo ajustada, en cuestión de minutos Alexander salió igual, al parecer éramos de la misma talla en pantalones excepto por las playeras.

—Bueno no es que me guste tu ropa, pero si queremos salir de aquí ilesos, tenemos que hacer esto—Alexander se veía en el espejo de una pared—Ahora Cross llevaras la sudadera de Ellie, yo la tuya y Ellie la mía.

—¿No será peligroso si llevas mi chaqueta?—Alexander se estaba arriesgando y eso es lo menos que quería.

—Ellie, tu saldrás primero, nos esperaras en el coche—Alex evadió mi pregunta y le dio unas llaves a Ellie.

En cuestión de segundos mi chica había desaparecido, mierda ella ya no es mía.

Vimos desde la segunda planta como Ellie cruzaba la calle y caminaba como si nada, agradecía que los espejos estuvieran polarizados, al mismo tiempo bajábamos rápidamente las escaleras y nos escondíamos entre las cajas.

—Ahora Cross, se que tu relato de matrimonio feliz y padre endeudado es una mentira, se que Ellie te ama, así como tu la amas a ella, agradezco que te alejaras en este tiempo y por supuesto me ayudaras, se que aun no nos entendemos pero pase lo que pase, gracias.

—Mi relato era verdad y ¿Por qué siento que esto es una estupidez?

—Tendrás tus motivos para mentir y debes admitir que es la estupidez más loca que has hecho.

—Es mejor que yo lleve mi chaqueta y tu lleves la de Ellie, no me lo perdonaría si te pasa algo, no yo, ya sabes Ellie.

Él solo sonrió.

—Nos vemos en el auto.

Alexander rápidamente salió corriendo del local.

—Chico los tipos que te seguían han pasado corriendo atrás del chico que acaba de salir—La chica del local hablo y a la vez le agradecí.

Mierda.

Sali corriendo detrás de Dallas.

Me detuve en un local, donde se podía ver como detenían a Alexander los tipos que me seguían, él pareció decirles algo y estos lo dejaron, era mi momento para irme.

Al llegar al estacionamiento del Centro comercial, Ellie y Alexander estaban algo nerviosos y miraban a todos lados, pasar desapercibido fue toda una misión, sin mencionar que me quede en un local más tiempo para no sacar sospechas.

Alexander me vio y este le dijo algo a Ellie quien volteo a verme rápidamente, solo unos metros nos separaban.

—¡Dios mío Cris!, pensé que nos habían descubierto—Ellie corrió hacia mi, al parecer quería abrazarme, pero se detuvo.

Pude ver que Alexander soltó el aire, que retenía.

—Bueno estas hablando de el mismísimo Cross, soy algo torpe pero difícil de ver—Reímos— gracias por ayudarme.

Alexander llego a nuestro lado y se unió a la conversación.

—Disculpen si arruine su cita o lo que fuera que estuvieran haciendo, les juro que se los recompensare en un futuro, si no es mucho pedir me podrían llevar a mi casa.

—Claro no hay problema.

Los tres nos subimos al coche y Alexander condujo.

[...]

Cuando estaba por llegar a mi casa, decidí que era mejor bajar una cuadra antes, así respiraba un poco y me tranquilizaba, hoy no ir al bar a desahogarme por mi tristeza. Los tres nos bajamos del coche, Ellie tomaba la mano de Alexander, y bueno yo interiormente tenía mi pelea entre ser el mismo tipo sin sentimientos o dejar ser feliz a Ellie.

Por supuesto que tuve mucha fuerza de voluntad para no dañar de nuevo a Ellie.

—Muchas gracias chicos, en verdad Alexander si no me hubieras visto no estaría vivo, no digan nada, solo gracias, nos vemos y disfruten su noche.

Di media vuelta y estaba por llegar a la ultima casa de la cuadra cuando oí el grito de Ellie.

—¡Cristopher!—Voltee mirándola sin saber que pasaba y al mismo tiempo veía como Alexander corría hacia mi, ¿Cómo es que llego tan rápido?, no entendía lo que sucedía, hasta que desvié mi mirada hacia la izquierda y ahí pude ver a los chicos que me seguían con una pistola, apuntándome, rápidamente voltee tratando de decirle a Alexander que se detuviera, pero ya era demasiado tarde este me tacleó, haciendo que me cayera de pompas al pasto de la casa.

El ruido del balazo se oyó y como si se tratara de una película vi como Alexander lentamente caía.

—¡¡ALEXANDER!!—Ellie grito con todas sus fuerzas.

Él no me conoce ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora