29- The party

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A medida que los estudiantes vamos ingiriendo alcohol, la tensión entre Gryffindors y Slytherins va disminuyendo. Yo esta vez decido controlarme; el alcohol en el momento es increíble, pero a la mañana siguiente es insoportable. Además, si voy a tener otra pelea con alguien, me encantaría estar sobria y poder ser consciente de cada cosa que diga.

Siendo honesta, la fiestas organizadas por los Slytherin siempre acaban siendo las mejores. Suelen poner música muy alta y traen una gran cantidad de comidad para picar y buen alcohol. Lo único extraño de esta fiesta ha sido la exclusión de los estudiantes que no pertenecieran a la casa de Gryffindor o a la de Slytherin. De hecho, se pidió que no les contáramos nada a los Hufflepuff ni a los Ravenclaw para mantenerlo en secreto y encubrirlo a la perfección.

Observo el panorama; por un lado están Amy y Riddle en el sofá, demasiado cariñosis para mi gusto, todo el rato besándose. Luego está Wood, de pie hablando eufóricamente con u  grupo de chicas que parecen estar encantadas por su presencia. Por otra parte están los mellizos, juntos como siempre, hablando animadamente sobre quidditch con los jugadores de Slytherin. Y luego estoy yo; sóla con un pequeño vaso de cerveza y deseando que Wiglaf pudiera estar conmigo en ese momento.

    -¿Está siendo aburrida la fiesta? -pronuncia Abraxas Malfoy a mis espaldas.
    -Esperaba algo más animado -me giro y le sonrió, a lo que él choca su vaso con el mío.
    -¡Salud! -ambos damos un trago-. Yo quería hablar contigo.

Levanto una ceja sorprendida; ¿desde cuándo Malfoy ha tenido interés en hablarme?

Me lleva a una esquina de la sala común para tener más privacidad.

    -Es sobre Riddle y Amy -ruedo los ojos tras escuchar el motivo de nuestra conversación-. Riddle está realmente raro.

Alcanzo con la mirada a Riddle; desde luego está más cambiado. O al menos con Amy. Sigue teniendo esos aires de superioridad, pero fusionados con una especie de ternura y risa constante.

    -Lleva semanas sin estudiar con nosotros y sus calificaciones no han mejorado

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    -Lleva semanas sin estudiar con nosotros y sus calificaciones no han mejorado. Hasta el profesor de pociones habló conmigo -me mirs frustrado-. No sé qué mosca le habrá picado.
    -La mosca del amor -miro una vez más a la parejita-. Hay personas que tras emparejarse tienden a distanciarse de los demás o a desconcentrarse.
    -Sí, pero Tom no es ese tipo de persona -busca mi compasión-. Él es muy determinado y ambicioso, me cuesta creer que esté cambiando todos sua planes de futuro por una chica.

¿Planes de futuro? Ni que Riddle tuviera escrito ya cada cosa que debe hacer en un futuro.

    -Tiene un diario -declara-. Pero está vacío.
    -¡Ah, sí! Lo vi.
    -¿Qué? ¿Cuándo estuviste en nuestra habitación? -le relato lo sucedido tras el asesinato de Sallyand-. O sea que estuviste durmiendo en mi habitación y ni me di cuenta. ¿En qué planeta incomunicado vivo? -ríe.

Río yo también porque su risa es demasiado contagiosa. En verdad, Malfoy es un chico agradable. O al menos lo es cuando bebe un poco de alcohol.

Tras haber mantenido una conversación durante media hora, comienza a sonar animadamente la melodía de una canción que reconozco al instante, ya que es una de las favoritas de mi madre. Me giro entusiasmada para ver si alguien más aprecia la canción que está sonando, pero todo lo que veo son grupitos de amigos charlando y riendo, haciéndole caso omiso a la canción.

   -Me encanta esta canción -grita Malfoy por encima de la música-. Y mira que la música muggle me suele disgustar.

    -¡A mí también me encanta! -agarro su brazo y le llevo vailotenando a lo que se supone que es la zona de baile.

    -¡We'll make heaven our place on Earth! -cantamos al unísono, acompañando la melodía con risas.

Durante este chute de euforia, pero sin dejar de cantar con Malfoy, se acerca Tom con un semblante serio, acompañado por Amy. No obstante, eso no hace que Malfoy y yo dejemos nuestro recital. De hecho, cada vez me siento más cómoda y cómplice con Malfoy.

    -No conozco esta canción -dice Amy mientras se une a bailar con nosotros.

    -Parece ser que sólo Abrazas y yo la conocemos -admito sonriendo a Abraxas-. ¡Qué buena coincidencia! 

La canción llega a su fin y yo me acerco a Abraxas para darle un buen abrazo. Hacía tiempo que no pasaba unos tres minutos de agradables con un Slytherin. Por suerte, él correspondió al abrazo, admitiendo que se había divertido.

La fiesta continuó, y como siempre se ha hecho, comenzamos a jugar a verdad o atrevimiento. La situación se volvió a tensar ligeramente, ya que los Slytherin proponía a los Gryffindor cosas inaceptables, y vice versa. Además de que los retos de verdad eran muy directos y dañinos por ambas casas. Yo realmente no les presté atención ya que continué hablando con Malfoy de temas variados (hasta comentamos jugadas de Quidditch). En cierto punto opinó sobre mi capitanía en el equipo, y dijo que le parecía sublime y admirable.

Se me aceleró el corazón al ver llegar a Troy, y esperé a ver la reacción de Amy. No obstante, esta estaba una vez más concentrada en Riddle. Aún así, este sí vio llegar a Troy y le estrechó la mano. Vi cómo Troy señalaba extrañado con su cabeza a Amy, esperando una respuesta por parte de Riddle. Este asintió con la cabeza, lo que hizo que Troy pusiera una cara de asco aún más extrañado.

    -Esta bien -nos llamó la atención un chico de Slytherin-. Le toca a Troy por ser el último en llegar.
    -Vale, bien -dice este-. Reto.

Los presentes nos miramos entre nosotros, esperando la propuesta de alguien.

    -Báñate en el Lago Negro -le reta Abraxas a mi lado.

Instantánemente todos miramos hacia el techo de la sala común, ya que el Lago Negro se encuentra sobre la sala común de Slytherin.

    -Ni de coña lo vas a hacer -digo, mirando a Troy.
    -¿Estás tan segura, Kleine? -dice-. Acepto el reto. Y si queréis, que vengan algunos como testigos.

Abraxas se levanta, poniéndose voluntario para presenciar el baño nocturno de Troy. Me extiende la mano para ayudar a levantarme; yo también iré a verlo, junto con Amy Riddle.

    -Te vas a tragar tus palabras, Kleine -dice Troy, encabezado la excursión hacia el Lago Negro.

Fin del capítulo 29...

heirs & romances [Tom Riddle]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora