-NARRA NOELIA-
Yo: Tengo sueño.
Finn: Duerme mi amor.
Finn me agarró y me colocó las piernas para que pudiese dormir aunque fuese un poco.
Yo: No voy a poder dormir.
Finn: ¿Porqué?
Yo: Porque tengo una distracción.
Finn: ¿Cuál?
Yo: Tú, me distraes -dije sonriendo-
Finn se acercó y me besó lentamente.
Cuando ya estaba apunto de dormir, Finn me hizo levantarme.
Finn: Mi vida, despierta, ya llegamos.
Yo: ¿Qué? -abrí los ojos con malhumor-
Finn: Ven, ya llegamos.
Yo: Voy.
Me levanté y Finn me dio la mano para que saliese y salí, el chófer nos llevó las maletas hasta dentro del aeropuerto, había un montón de paparazis, empezaron a sacarnos fotos y a preguntarnos cosas , Finn no respondía y yo no tenía ganas. Entramos en el aeropuerto.
Finn: Sigo sin creerlo.
Yo: ¿El qué?
Finn: Que estoy casado con la chica más guapa del mundo.
Yo: Te amo -le di un beso-
Finn: Y yo a ti.
Anduvimos un rato más agarrados de la mano y llegamos hasta la recepción a preguntar cuando faltaba para nuestro avión.
Finn: Hola ¿Quería saber cuanto falta para el avión hacía las Islas Seychelles?
Recepcionista: A ver, veamos -dijo mirando su ordenador- Ya pueden ir embarcando, es por la puerta 13.
Finn: Vale muchas gracias.
Fuimos caminando hasta la puerta que nos habían dicho. Llegamos a la puerta y alguien gritó el nombre de Finn ¿A quien se le ocurre gritar a las 3:55 de la mañana? Tras escuchar ese grito como un grupo de 10 chicas se acercaron a Finn, la mayoría eran adolescentes de 16 o 17 años.
Finn: Hola chicas -dijo sonriendo-
Todas las chicas gritaron.
Chicas: ¿Nos podemos sacar una foto con vosotros?
Finn: Claro.
Nos sacamos la foto y a Finn después le pidieron autógrafos y esas cosas, cuando terminaron se fueron y pudimos entrar tranquilos. Seguimos andando hacía la puerta que nos habían indicado y un chico joven de 22 años, cuando nos vio, me miraba, yo sonreí y por dentro me estaba riendo y Finn lo notó y se puso celoso.
Chico: ¿Me dejan ver sus billetes?
Finn: Si.
Chicos: ¿Este de aquí es solamente su billete o los de su acompañante?
Finn: Míos y de MI esposa -dijo remarcando la palabra mi-
Chico: Vale.
Tras decir eso, el chico ya no me miró más y se portó más profesionalmente, cuando terminó con los billetes nos dio el paso a pasillo para ir hacía el avión, llegamos al avión, subimos y nos sentamos.
Yo: ¿Qué te pasa mi amor?
Finn: ¿No viste como te miraba ese?
Yo: ¿Celoso?
ESTÁS LEYENDO
365 DÍAS JUNTO A ELLA.
FanfictionLa familia Wolfhard Fernández es como toda familia después de un divorcio, el señor Eric Wolfhard al divorciarse de su esposa Mary Jolivet encuentra el amor con la señora Celia Fernández, al conocerse vuelven a creer en el amor, ellos dos tienen hij...