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—¡Hola, chicos! ¿Cómo están?

—No tan bien como tú —sonrió México Norte.

—Ni tan bueno —coqueteó México Sur.

El canadiense solo rio bajito, sin entender muy bien a qué se referían esos dos.

—Les traje obsequios. No es mucho, pero espero les guste —sonrió—. Y creo que Hub les puso algo extra, no estoy seguro de qué sea.

—Esto promete —corearon los hermanos.

—Debo irme, pero otro día podríamos salir juntos. Adiós, chicos.

Se despidió al agitar su mano, sonriendo con amabilidad, denotando las pequitas que adornaban ese rostro.

Cómo no suspirar por ese wero.

—Me lo quiero coger —susurró Norte.

—Quiero que me coja —segundó Sur.

Costa Rica, que pasaba por ahí de casualidad, suspiró y llamó a alguien.

Porque deberían prevenirse.

—USA... ¿conoces lo que son los calzones de castidad? ... Dale uno a tu hermano...

—¿Por qué?

—Tengo una corazonada.

Nubes [México x Canadá]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora