Nubes [México x Canadá]

33.

—Si fuera tu cumpleaños, maple, te llevaría a un paseo por el centro, después al cine, a un restaurante que te gustara y luego te haría el amor lento y suave... —suspiró.

—Mexique —Canadá lo miró un momento—. Hoy es mi cumpleaños.

México entró en pánico, porque acababa de decirle el plan perfecto para la fecha perfecta... Pero se olvidó que ese día era EL DÍA.

Tenía que decidir si decir que fue broma o que lo planeó así desde el inicio.

Pero la risita de su amorcito le ganó.

—¿Qué?

—Mexique... estaba bromeando —sonrió—. No es mi cumpleaños.

—No me hagas esto, maple. Casi me muero.

—Si mal no recuerdo... —Canadá hizo cuentas con sus dedos—. Eso fue hace quince días.

—Ya no me hagas esas bromas, mi vida.

—Esta vez es en serio —sonrió antes de volver a su libro—. Tranquilo. Ni siquiera yo lo recordé.

Después de eso, México pasó disculpándose durante quince días, y Canadá sólo suspiró y minimizó aquel asunto.

Lo malo de vivir en una cabaña alejada de todo, era que incluso las fechas no importaban.