Capitulo 25.

4.9K 557 245
                                    

Regulus arrastró a Theo a Hogsmeade el sábado por la mañana, solo porque quería salir, no porque estuviera celoso y quisiera ver que Diggory no le hiciera nada a su pobre bebé, por supuesto que no.

Y qué estuvieran sentados en una mesa que daba directamente a la de Harry era simple coincidencia.

— Regulus, si Harry se entera que lo estás espiando se va a molestar — Mencionó su amigo con voz cansada.

— ¡No lo estoy espiando! Vinimos aquí a desayunar, ya te lo dije — Replicó mirando hacia dónde su compañero de habitación se encontraba. Este estaba comiendo lo que parecía ser tarta al igual que Cedric, y ambos parecían estar charlando de algo sumamente divertido a juzgar por sus sonrisas y ocasionales risas.

Harry no solía reírse así con él y no pudo evitar gruñir al darse cuenta de aquello.

Aunque tal vez su cabeza solo le estaba haciendo creer aquello.

— Ajá — Theo sonrió alegremente a la mesera — Buenos días, ¿tiene tarta de zarzamora? — Cuestionó recibiendo rápidamente afirmaciones — Me daría un trozo y algo de chocolate caliente por favor — Golpeó el brazo de su amigo disimuladamente, una clara señal de que era su turno de ordenar.

— Lo mismo por favor — Pidió sin apartar su vista de Harry en ningún momento, como si temiera que al apartar los ojos algo sucediera.

— Merlin Regulus, no sabía qué los Black eran tan creepys — Theo mencionó, mirando hacia el mismo lugar que él.

Diggory se encontraba revolviendo el cabello de Harry mientras este reía contento.

Lucían tan fraternales ante sus ojos, ¿cómo aquello podría preocuparle a su amigo?

— ¿Crees que Diggory es lindo? — Cuestionó a Theo en un pequeño susurro.

— Bueno, considerando que es el partido número uno de Hogwarts y que hace babear a la mitad de la escuela, mi respuesta es un claro si — Musito dando el primer bocado a la tarta que anteriormente les habían traído, gimiendo de gusto ante el sabor.

— Harry cree que es lindo — Mencionó apuñalando a su tarta con el tenedor, llevando descuidadamente una parte de esta a su boca.

— Tiene buen gusto entonces — Theo se encogió de hombros, no luciendo demasiado preocupado por aquello.

— ¡No! ¡No lo entiendes! ¿Y si a Harry le gusta Diggory? — Regulus cerró sus ojos con fuerza, negando de forma lenta mientras intentaba apartar aquel pensamiento de su cabeza.

— Oh por favor — Theo musito, dándose cuenta de que escena estaba por ocurrir incluso antes de que él mismo Regulus lo supiera.

Pero al parecer las plegarias silenciosas del chico fueron escuchadas, ya que su amigo decidió concentrarse en Harry y la tarta a medio comer en lugar de en soltar comentarios sarcásticos que solo empeoraban su humor.

Regulus no creía que aquel día pudiera ir peor, pero comprobó que no debía hablar antes de tiempo cuando sin previo aviso Harry salto sobre los brazos de Cedric, riendo alegremente a lo que sea que el mayor le estuviera diciendo.

El corazón de Regulus dio un no tan ligero apretón entonces, enviando un fuerte dolor por todo su pecho y parte de su estómago, haciendo a su vez que tragar sea difícil y termine ahogándose con su tarta.

Soulmate.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora