Harry se sentía extraño mientras caminaba hacia el tren, porque está vez James no subiría con él, no estaría con él en el vagón, sino que se despediría en la estación junto a sus padres.
No estarían Sirius y Remus para ofrecerle irse a vivir con ellos, o Peter para hacerlos reír con sus tonterías.
Tampoco estaría Severus o Lucius para ayudarle con algunas dudas o molestarle en la sala común.
Ni Lily para leer tranquilamente en la biblioteca o Bellatrix para hacerle bromas a los chicos.
Y Harry ciertamente estaba un poco melancólico.
Era su último año, un último año de esa etapa llena de aventuras, momentos increíbles y descubrimientos, un año más y todo eso acabaría y...
— Te juro que si estás pensando en el futuro te golpeare — Un rubio platinado comentó frente a él mientras subía al tren.
— Solo será extraño, un año sin los merodeadores, mi lindo cuñado, Severus, Lily, Bella — Harry hizo un pequeño puchero hacia su mejor amigo.
— Lo se, pero me tendrás a mi — Draco señaló mientras dejaban los baúles, comenzando a caminar en dirección a los vagones disponibles.
— Lo se, eso me reconforta — Harry suspiró mientras tomaba asiento al lado de Draco, recargándose sobre su hombro de forma desanimada.
— Vamos mi pequeño Harry, no estarás deprimido todo este año en lugar de disfrutarlo, ¿o si? — Draco intentó animar a su amigo, quien negó contra su hombros sin separarse.
— ¡Hola chicos! — Theo entró al vagón con una sonrisa, besando los labios de Draco y la mejilla de Harry antes de dejarse caer al lado de este — ¿Melancólico? — Theo cuestionó hacia su novio mientras observaba la actitud desganada de Harry.
— Así es — Confirmó el rubio, ambos poniéndose de acuerdo y abrazando a Harry a la vez, quedándose como un pequeño sándwich humano.
— Los chicos seguramente están planeando como comprometerse con sus parejas y tú aquí triste en tu último año — Theo regaño.
— De hecho es muy probable — Harry murmuró bajito, recargándose contra el hombro de Theo esta vez — Se imaginan, los chicos casándose, teniendo hijos.. — Harry sonrió un poco.
Era extraño, aún eran jóvenes, pero aquel futuro se veía tan cercano...
— Hola chicos — Regulus entró al vagón junto a Narcissa y Astoria, interrumpiendo la línea de pensamientos que habían adoptado los chicos luego de las últimas palabras de Harry.
— Hola — Los tres saludaron a la vez, solo incorporándose lo suficiente para saludar a las chicas y a Regulus.
— ¿Están bien? — Cuestionó Narcissa confundida hacia el sándwich de chicos frente a ellos.
— Harry estaba melancólico, y nos puso melancólicos a nosotros también, así que somos el sándwich de la tristeza — Draco explicó sin moverse.
— El sándwich...
— De la tristeza — Terminó Astoria por Narcissa, mirándoles de forma divertida.
— Extrañare a mi hermano, cuñada, mis padres adoptivos, mi prima predilecta, mi primo por mi prima predilecta, mi cuñado, y a mi tío-primo — Harry comentó en un pequeño murmullo.
— Wow — Narcissa le miró sorprendida, intentando conectar las descripciones con los chicos, y Harry entendía que podía ser confuso, pero tenía sentido cuando lo analizabas de forma detallada.
— Si Sirius es tu padre adoptivo, y Regulus es su hermano, ¿no los haría tío y sobrino? — Cuestionó Draco, pareciendo haber analizado la situación.
