— ¡Te juro que si no te apresuras me iré sin ti! — Regulus gritó, sintiéndose demasiado estresado por el tiempo en que su hermano se demoraba en alistarse, él quería irse al tren ya y ver a Harry, y bueno al resto, pero en especial a Harry, a quien había extrañado demasiado durante esas vacaciones.
— Oh cállate Regulus, no entiendo tu apuro — Resto importancia Sirius volviendo a cambiarse de playera, ignorando la razón por la que su hermano se encontraba así.
— ¡Quiero ver a Harry! — Explicó brevemente, esperando que con eso entendiera cuánto significaba para él que se apresurara.
— Oh por Merlin, ya cásense — Musitó el mayor por lo bajo, siendo escuchado por su hermano y causando que este se sonrojara casi al instante, entendiendo la implicación de sus palabras.
— Solo apresúrate — Repitió en voz baja, sin poder hacer contacto visual en ningún momento o decir algo mejor.
Sirius le miró sospechosamente ante eso.
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— Quiero que me pidas disculpas — Mencionó el mayor una vez tomaron lugar en el vagón — Fui maltratado física y mentalmente de tu parte en todo el trayecto hacia acá, todo por "tardar" y somos de los primeros en subir — Lo miró mal, haciendo que Regulus rodara los ojos.
— Cierra la boca, además, allá viene Remus — Regulus miró hacia fuera del vagón donde su cuñado ya se dejaba ver, entrando segundos después al lugar — ¡Hola Remus! — Saludo con una sonrisa, sonrisa que fue devuelta por el lobo una vez su mirada paró en él, acercándose de forma instantánea.
— ¡Hola Regulus! ¿Creciste aún más? — El castaño lo abrazó con fuerza contra su pecho mientras Regulus reía correspondiendo el abrazo, adoraba a su cuñado.
— Oh por Merlin, ¿acaso me estas cambiando por mi hermano? ¿En mi propia cara Remus? — Dramatizó el de cabello rizado largo dejándose caer y haciendo que ambos chicos rodaran los ojos con cansancio. Sirius siempre sería igual de dramático.
— Ven aquí — Musito Remus, y solo eso bastó para que el mayor se lanzara a los brazos de su novio, tumbándolos a ambos sobre el asiento y dejándolos pegados como lapas, Regulus comenzó a ignorarlos luego de aquello.
Estaba entusiasmado por ver a Harry, había estado esperando ese momento prácticamente desde que se despidieron en la estación, pero ahora el saber que el chico estaba por entrar por esa puerta le hacía entender que había extrañado a Harry más que lo que pensó, y aquello era decir demasiado.
— ¿Pueden al menos guardar silencio? — Cuestionó Regulus mirando a su hermano y cuñado con molestia, y causando que ambos se sonrojaran de forma rápida. Debería sentirse culpable por sonar grosero pero ciertamente era incómodo saber y escuchar que tu hermano se esta prácticamente comiendo a alguien frente a ti.
— Harry está por entrar — Murmuro Remus luego de algunos segundos de silencio, causando que el ceño fruncido de Regulus desapareciera y su corazón comenzara a latir más rápido, en la espera de lo que más había anhelado.
— ¡Hola chicos! — Harry entró al vagón segundos después luciendo tan lindo como solo él podía, con sus mejillas sonrojadas, sus labios rojos cual cereza, ojos brillantes, cabello despeinado, Merlin, y una radiante sonrisa que podría haber iluminado la ciudad entera de haber tenido la oportunidad.
Regulus no se dio cuenta de que estaba mirando a Harry con expresión de estúpido hasta que este se lanzó a sus brazos con entusiasmo, sacándolo de su estado de shock y hundiéndolo junto con él en una burbuja suave y llena de colores pastel.
— ¡Te extrañe! — Murmuró el de ojos verdes contra su cuello, causando que un pequeño escalofrío recorriera su espalda en seguida, sus brazos moviéndose instantáneamente para rodear al contrario de la misma manera.
— También te extrañe Harry, no tienes idea de cuánto — Respondió, escondiendo su rostro en el cuello de este e inhalando el familiar olor como si de un perrito detrás de su comida favorita se tratase.
— Hola a ti también Harry — Sirius murmuro, un poco divertido por cómo ambos chicos parecían ignorar sus existencias por completo.
— Silencio Sirius — Reprendió su hermano, moviendo a Harry de tal manera que este quedará sentado sobre sus piernas, logrando así que ambos pudieran seguir perfectamente abrazados sin incomodarse en lo más mínimo. El menor en respuesta escondió su rostro en su cuello y acomodó mejor sus brazos, recargándose sobre él de forma sencilla.
Regulus suspiró contento, abrazando la cintura de Harry con suavidad y firmeza, su agarre no vacilando en ningún momento y quedando tan relajado y a la vez perdido de lo que sucedía a su alrededor que solo reaccionó cuando la voz de Remus se escucho, lejana y baja pero alcanzó a oírla.
— ¿Harry? — Llamó el castaño con suavidad, no queriendo interrumpir la atmósfera blanda que se había creado alrededor de los chicos — ¿Sabes donde están James o Peter? — Preguntó ante la ausencia de los dos merodeadores.
— James está esperando a Lily y Peter está con Paige — Explicó Harry, sin sacar en ningún momento el rostro del cuello de Regulus y luciendo tan cómodo que nadie podría cuestionarlo al respecto, mucho menos Regulus, quien estaba prácticamente ronroneando por estar rodeado del calor y olor de Harry.
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— ¡Hey Harry! — Llamó Draco acercándose al ojiverde apenas lo vio llegar a la sala común, siendo que durante la cena en el gran comedor no habían tenido gran oportunidad de hablar.
— Alto ahí Draco — Regulus lo detuvo, colocando casualmente su brazo alrededor de la cintura de Harry sin siquiera notar sus propios movimientos — Tuviste a Harry todas unas vacaciones, es mi turno — Y con eso, sin retirar su brazo en ningún momento, guió a su amigo directamente hacia la habitación.
— Eso fue grosero — Musitó el ojiverde por lo bajo mientras cerraba la puerta tras ellos, recostándose sobre su cama segundos después.
— No, no lo fue — Negó Regulus, tomando el brazo de Harry y jalándolo hacia su propia cama, haciendo que este caiga sobre su cuerpo y se acurruque sobre él sin poner mucha resistencia — ¿Cuantas veces te viste con Draco durante vacaciones? — Cuestionó comenzando a acariciar el cabello del azabache con suavidad.
— No lo se, ¿unas 15? — Respondió suavemente sin querer discutir demasiado.
— ¿Ves? Es mi turno, él ya te tuvo por mucho tiempo— Argumento Regulus mientras comenzaba a mecer a Harry sobre él.
— Tu me tienes todo el tiempo — Aseguró Harry frotando su rostro contra su pecho con suavidad, Regulus sonrió enternecido por tal acción, su amigo era tan tierno.
— Y me encanta que sea así — Respondió besando su cabello repetidas veces, con tanto cariño que se vio abrumado por un par de segundos, siendo consciente por primera vez de cuán fuertes eran las emociones y sensaciones que Harry causaba en él y dudando de si aquello era normal.
— Las próximas vacaciones te secuestrare — La voz del menor lo saco de sus pensamientos, haciendo que sonría con un poco de burla, sabiendo que aquello no sería necesario.
— Oh créeme, pondría tanta resistencia como un escarbato a las cosas brillantes — Bromeó haciendo que Harry ría suavemente antes de dejarlos a ambos en un nuevo silencio, uno cómodo y donde ambos disfrutaban cada segundo.
— Regulus — Llamó minutos después en voz baja, mientras levantaba su rostro y lo miraba tan intensamente que su corazón se saltó un latido — Te quiero mucho — Musitó antes de depositar un beso en su mejilla para posteriormente colocar su cabeza sobre su pecho nuevamente.
Y entonces Regulus se dio cuenta que en efecto, todas las sensaciones que le llenaban cuando se trataba de Harry y solo de Harry, no eran normales.
