03. The only light in the dark.

852 111 102
                                    

. . .


La oscuridad era inminente.

El mapa de asedio estaba tan oscuro, frío. Había un extraño aire que chocaba contra ellos, causando un temblor que se extendería por todo su cuerpo.

Había extrañamente demasiado frío ahí dentro.

Byron y Colette se encontraban buscando de un lado a otro alguna cosa que Edgar pudiese haber dejado. Nadie había tocado asedio desde que comenzó el drama del adolescente perdido.

Ni siquiera Pam había salido de su hogar a menos que fuera por comida y deberes.

Lo que preocupaba a Byron era que ni Pam, ni su hija ni su robot niñera sabían que ellos estaban ahí. Si cualquiera de las tres salían y los veían, podrían haber problemas, y ninguno de los dos estaba en condiciones de pelear.

Byron mantenía cierta distancia con Colette. Tenían tiempo para buscar, era de noche y todos estarían ocupados tomando como animales en el bar de Barley.

El señor dejó de titubear y se le acercó más a la joven.

-Al final... ¿Si revisaste su teléfono móvil?

Colette, quien seguía buscando exhausta, le respondió de mala gana sin dejar de buscar en medio de la oscuridad.

-Lo intenté, pero cambió la contraseña de nuevo.

Byron gruñó al respecto y miró a otro lado.

-Préstamelo, creo que puedo saber cuál es...

Colette lo miró confundida, y saliendo de los arbustos en los que estaba buscando, le extendió el brazo con el celular en la mano. Byron se tomó unos segundos en tomarlo, realmente estaba muy oscuro y la linterna de Colette no era suficiente para los dos.

Con el celular entre manos, suspiró y lo encendió sacando el diario del bolsillo interno de su abrigo verdoso.

Con el mismo celular al brillo medio alumbró el diario y rebuscó entre las páginas. Recordaba haber visto en alguna página la nueva contraseña del celular.

Pasando por distintas páginas en el horrible silencio mortal del mapa, Byron se tomó su tiempo en buscar pues releía todo lo que podía.

-Creo que me pasé de páginas a este punto...

-Apresurese por favor...

Y Byron retrocedió un par de páginas rápidamente... Cayendo la página que estaba esperando...

Había un texto largo, muy rayado que apenas podía leer. Justo abajo de aquel texto la encontró. La contraseña.

-"HurtToBeInmortal21".

-¿En serio esa es la contraseña?

Colette dijo casi entre risas.

-Edgar siempre poniendo cosas edgys, ¿cómo no pensé en eso...?

-Si con "edgy" te refieres a rayones y hojas rotas, creo que sí lo es.

-No me sorprendería que esa página tenga eso, exactamente.

-Lo conoces mejor que yo... Justo la hoja está más rota que mis esperanzas.

Rooms, Anxiety and Silence [OLD]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora