It's my life |Editando|

Capítulo 15 "Buscarla"

Capítulo 15 "Buscarla"

*Narra Daniel*

-¿Qué es lo que quieres?-Le pregunté desafiante.
-Lo sabrás,cuando sea necesario.-Él continuó vacilante.

Rodeé los ojos,estaba completamente tenso.Furioso conmigo mismo,y a la vez decepcionado.

-¿Dónde está?-Pregunté serio,con tono enfadado.
-No sé dónde se la han llevado.-El calvo se hizo el loco,con una sonrisa maliciosa.

Me acerqué hacía él,con paso apresurado.A zancadas,con una pistola sostenida,un revolver,en mi mano derecha.

-No vale la pena,Dani.-Murmuró Jesús,serio pero calmado.
-Tal vez sí.-Respondí,ya a su lado.

Le apunté sobre su cabeza, con mover mi dedo índice podría acabar con él.Y bien que se lo merecía.

-Así no Dani.-Advirtió Jesús.

Le miré aún no he conseguido borrar ese recuerdo,jamás me perdonaré aquello.No quiero que vuelva a pasar.

-Ves a por ella.¡Búscala!-Dijo agarrándome del brazo.

De nuevo volvió a reír,el calvo.
Le miré,mil y una ideas pasaron por mi cabeza.Pero aparté el revólver.A continuación subí al coche,y me dispuse ir a buscarla.Me necesita.

*Narra Lucía*

-¿Sabes qué vamos a hacerte?-Preguntó retórico el castaño,el conductor.

La cámara justo en medio del salpicadero,me apuntaba directamente.Guardando dentro de su memoria, aquellos llantos y amenazas.

-Tan sólo vamos a enseñarte que es una buena polla.-Continuó el conductor entre risas.
-Te gustará.-Murmuró el friki, a su lado.

Yo seguía tendida en la parte trasera,boca abajo.Cada vez más roja,y con más lágrimas recorriendo mi ser.Primero sobre mis mejillas,pero continuando por el resto de mi cuerpo.Convertidas en sudor frío,en miedo,terror.

-Nos lo pasaremos más bien.-Murmuró sensual,el conductor.-Ganas tengo de quitarte esas braguitas,tan caras.-Siguió éste.
-Yo prefiero quitar algo más,Mario.-Prosiguió el friki.

Aquellos dos rieron,cada vez más fuerte.En ese instante levanté la mirada,pasé mis manos por las mejillas,con la intención de,al menos intentar ser fuerte.Aunque ya me hayan oído llorar estrepitosamente.

-¿Dónde me lleváis?-Pregunté inocente,aun con la voz ronca.

Aquellos dos rieron,no sé cómo será el infierno,pero esto es peor.

-A ningún lugar bonita,tan sólo sé,que jamás lo olvidarás.-Respondió el conductor.
-Saluda a la cámara.-Canturreó el friki,burlándose de mi.

Miré fijamente a la cámara,a ese enfoque,con una luz roja parpadeando.

-Y despídete del mundo.Este es tu último viaje,conejita.-Amenazó frío como el hielo, el castaño conductor.

Me estremecí al escuchar esas palabras,y una pequeña pero no menos importante lágrima,nació de mis ojos.

No podía pronunciar palabra, no me daban miedo ellos,lo que verdaderamente me aterraba era mi imaginación.

Miles de ideas,por cada vez que pasaba,más espeluznante y dolorosa.Cerré los puños de impotencia.Ellos tan sólo se reían,y amenazaban.Yo aguantaba ese dolor,ese dolor que había sentido años atrás, pero más fuerte y sentido.

-Que bien nos lo pasaremos.-Rió el conductor.
-Voy afilando los cuchillos.-Anunció el friki,abriendo la guantera.

De pronto me encontré un cuchillo,a centímetros de mi estómago.Mientras aquel energúmeno reía,y amenazaba.

-Apártala.-Susurré aterrada.
-¡Déjala!Más tarde nos reiremos.-Dijo malicioso,el otro hombre.

Aquél,lentamente alejó aquel cuchillo,mientras yo soltaba un suspiro.Me senté en la izquierda,observé el paisaje.

Campo,y carretera.Oscuridad y soledad.Ya negra noche.La peor noche de mi vida.

Lágrimas silenciosas volvían a recorrer,aquellas mejillas rojas.
Desesperada por no verle,de que no me ayude.De pensar que sentía lástima,y haya dejado que me volvieran a coger.

-Idiota...-Susurré,casi inaudible.Lamentándome.

Soy estúpida al pensar que vendría.¡Si es el asesino de mi mejor amiga!No sé como pude pensar eso,tendré que ser valiente,y arreglármelas sola.Cómo siempre he hecho.

-No te impacientes,conejita.-Volvió intervenir el conductor.

Le ignoré,no se merece nada.

-Vamos a caldear el ambiente.-Murmuró de nuevo aquel individuo.

Encendió la radio del coche, dejando oír canciones de Rock,Heavy Metal.Cada una mas agresiva y sádica que la anterior.A todo el volumen.

Al cabo de unos segundos,el coche paró,un Stop.Yo aproveché esa oportunidad.

En aquellos valiosos segundos abrí la puerta silenciosa,y cuando arrancó, salté de ese infierno.Entre sus cantos,y gritos.

Aún en ropa interior y descalza,empecé a correr.Sé que poco tardarían.Cosa que fue así.

No sé cuánto tiempo pasó,yo corría por el arcén.Pero apareció un coche detrás de mi,vi sus siluetas,más enfadadas que nunca.

Yo corría,todo lo que podía. Pero algo me salvó,alguien me agarró.Me tapó la boca con sus cálidas manos,y me llevó bajo el arcén,justo al lado.
Escondidos entre arbustos y plantas,pero sobretodo por la oscuridad.Me tiró al suelo, éste yendo detrás.

Agarrándome la cintura con una mano,y la otra puesta sobre mis labios,sellándolos.

Suave,sin ser demasiado bruto.Haciendo que cerrara los ojos,y que por fin me relajara.Un escalofrío recorrió mi cuerpo,tan sólo me susurró.

-He venido a buscarte,estas a salvo.-Dijo éste con su voz ronca,pero sensual.

Abrí los ojos de golpe,hice un pequeño movimiento con mi cuello,de tal manera que podía ver parte de su rostro.
Barbilla marcada,nariz chata y con unos ojos brillantes,pero fríos.Ese era Daniel Oviedo.Ha venido a buscarme.

A continuación oí pasos,unos pasos muy cerca,demasiado.
Mi corazón aceleró,quería irme,desaparecer.Pero él,tan sólo me agarró más fuerte,lo notó.

-Aquí no hay nada Mario.-Oí decir.
-Habrá ido,hacía otro lado.-El otro mascullo agresivo.

Un coche arrancar se oyó, después de unos segundos tensos,aterradores.Aquellos dos habían desparecido.

Dani me soltó,yo dejando caer un suspiro.Pero permanecí sin moverme,no quería que me dejara ir,de nuevo.No quería eso,ni él tampoco ya que me respondió.

-Ya sé que te gusta esto,pero tengo que comprobar una cosa.-Susurró ronco,pero a la vez sensual.

Él se desprendió de mi cintura y mis labios fríos y secos.Él se levantó,y le vi desaparecer.

Después de unos interminables segundos, volvió a aparecer.

-Ven,sal.Vamos a casa.-Murmuró serio,pero dejando ver un resto de cariño.

Yo me levanté de allí,y volví a la carretera.Empezamos a andar hacía su coche,que estaba aparcado a unos metros.

-¿Estás bien?Te noto extraña.-Él masculló,de pronto por el camino.

Con mis desnudos brazos, intentaba taparme,no me gustaba que me vieran así,si no era por trabajo.Y menos él.

Le miré seria,mi buen humor anterior desapareció.¡Es idiota!Después de todo...

Tan sólo pude expresarme con lágrimas,lágrimas esta vez cristalinas,puras y nobles.

Él tan solo miró,no quería que volviera a suceder lo mismo.
Aunque no le gustara esa abogada,tan orgullosa y creída.Pero él esta noche había visto una faceta nueva de aquella joven destrozada, había encontrado la humildad y el agradecimiento,en su cara toda roja,y sus lágrimas cristalinas que pronto intentó disimular.