It's my life |Editando|

Capítulo 66 "Él era el experto asesino"

Capítulo 66 "Él era el experto asesino,consiguió matarme dejándome en vida"

«Narra Lucía»

Proseguí observando el paisaje de una Barcelona ya, totalmente despierta.Unos reían,otros tan sólo caminaban disfrutando de tan bello paisaje,mientras yo me deleitaba de la música que provenía de la cadena de Flaix FM.

La incertidumbre y la rabia recorría mi cuerpo de pies a cabeza,la sangre hervía cada vez que oía la sucia risa tonta de esa rusa entrometida.Creí por un momento que iba a explotar en cualquier momento,ya que de vez en cuando el chófer,clavaba su mirada en mi al ver cómo tensaba las mandíbulas,y la piel de mis mejillas enrojecía por momentos.Mis tripas rugían,así que saqué del bolso que sostenía en mi regazo,las Oreos que él, anteriormente me había entregado.De mala gana,pero a regañadientes comí,ya que intuía que en el día de hoy, poco realizaría ese acto si no me sacaba yo las castañas del fuego.

-Señorita,tiene chocolate en los labios.-Comentó el chófer sin mirarme.

Me asomé al espejo del retrovisor,y pasé mi lengua bajo el labio inferior,para así hacer desaparecer ese delicioso chocolate,que él,en la habitación había degustado con un beso.De nuevo,pinté mis labios de un tono rosado,y proseguí mirando el paisaje hasta que llegamos a nuestro destino.

Tras la indicación del chófer, bajé del vehículo en cuestión, y rápidamente me encaminé a las puertas de esas oficinas,extremadamente grandes y bien vistas.No me cabe a pensar,que esto es realmente extraño,ya que los negocios que debe mantener este tipejo,no deben ser nada legales.Vi como los tres bajaban de la parte trasera de la limusina,Inna con su estúpida risa tonta,y Dani dorándole la píldora.Como antes había realizado,pasó su mano por la cintura de ella,y prosiguió caminando hacía donde yo les esperaba, la verdad que incómoda y sin sentido,ya que no tendría que estar aquí,ni él,ni yo.

Guerrero se mantenía a su lado,los tres mostrando mucha complicidad,y conversando animadamente.
Tras llegar a mi posición,noté como los ojos de Guerrero posaban en mi,pidiendo que les siguiera,ya que Daniel ni siquiera había prestado atención a mi presencia,y eso la verdad que me indignaba.Éstos dos pasaron delante,para después en un despiste de ambos,Guerrero se situara a mi lado.

-¿Qué coño te pasa?-Él preguntó,bastante molesto.
-¿A mi me lo preguntas?-Yo repliqué,molesta.

Guerrero posó la mirada en aquellos dos,que seguían a su bola.Mientras,los dos hablábamos en susurros,sin que ellos se enteraran.

-Lo tienes,muy negro.-Masculló Guerrero,tras comprender el panorama.
-Que haga lo que quiera.A mi no volverá a tocarme.-Informé antes de entrar en el ascensor,donde ellos ya nos esperaban.

Agilicé el paso,Guerrero entró detrás de mi.El ascensorista apretó el número nueve,y éste empezó a moverse.Yo me apoyé en una de las paredes,en un lateral,para así que él no notara mi presencia,que tanto le molestaba.Crucé los brazos,y posé la mirada en mis pies.No tenía nada que hacer con esa entrometida rusa del demonio.Tan sólo me resigné,y esperé a llegar a nuestro destino.

Al sonar el «clinc» del ascensor,marcando la novena planta,los cuatro salimos de ella.Allí nos esperaban,dos hombres con sus respectivas secretarias, éstos trajeados y bien vestidos,volví la mirada a ellos,vestidos con unos jeans y una camisa lisa,sin faltar su chupa de cuero.Reí entre dientes,y fuimos a saludar a éstos.Noté las miradas de esos dos sobre mi,les deberá haber sorprendido mi presencia,o vete tú a saber.La verdad,no me gustaba nada de eso.

Acto seguido me situé al lado de las dos chicas que acompañaban a aquellos extraños hombres,los cinco pasaron delante de nosotros y se sentaron alrededor de una gran mesa de cristal, mientras que las tres restantes nos situamos en una de las mesas de los laterales,posé el bolso sobre la mesa,y crucé las piernas.