Capítulo#39

1K 88 75
                                    

La noticia de mi embarazo múltiple fue bien recibida por toda mi familia,tanto así que las chicas comenzaron a planear un babyshower con al menos seis meses de antelación mientras que Al y Matteo daban inicio a una ronda de apuestas sobre el sexo de los bebés.

Mis padres,por otro lado se tomaron los riesgos que conllevaría este embarazo con excesiva seriedad y empezaron a tratarme como una frágil muñeca de porcelana capaz de quebrarse hasta con un estornudo.

Dante,por su parte se dedicó a comportarse como mi guardaespaldas y mayordomo personal y aunque debo admitir que al principio me hacía
cierta gracia,luego de tres días esa situación empezó a hartarme así que le puse fin tras una colorida discusión que terminó conmigo mandándolo a dormir en el sofá y él regresando a la cama a las 3 am prometiendo dejar un poco de lado su paranoia.

Luego de eso las cosas en casa retomaron su ritmo habitual.

El resto de la semana transcurrió con calma y finalmente el día de elegir mi vestido de novia llegó,motivo por el cual en estos momentos me encontraba enzarzada con mi madre en una hilarante discusión telefónica.

**Pero mamá ¿qué sentido tiene que vaya hasta el departamento?
Lo lógico es encontrarnos en la tienda.**

Le explico por enésima vez.

Ella bufa molesta.

**¡Eres una tozuda como tu padre!**

Exclama a falta de un mejor argumento ganándose una queja por parte de mi progenitor.

Yo sin poder evitarlo me echo a reír olvidando mi molestia.

Una vez que mi risa se calma hago un nuevo intento por razonar con ella.

**Mami,lo mejor y más práctico es...

Y como era de esperarse ella me interrumpe antes de que siquiera lo intente.

**¡Ria Reynolds!
¡Vendrás a casa y no hay más que hablar!**

Exclama haciéndome sobresaltar.

Yo aparto el movil de mi oído porque creo que me ha dañado el tímpano, luego tomo una respiración profunda y vuelvo a acercarlo a mi rostro para hacer lo que cualquiera haría en mi situación.

**¡¡Está bien!!**

Espeto irritada claudicando antes de colgar a toda prisa para que no me riña por haberle gritado.

¡Dios mío!
¡Y luego dice que soy yo la cabezota!

Exclamo para mis adentros mientras me dirijo a la habitación para comenzarme a preparar.

*****

Luego de treinta minutos de viaje Dante estaciona frente a mi antiguo departamento.

Bien bellezza,aquí estamos.

Declara con una sonrisa mientras desabrocha mi cinturón.

Amore Italiano © [Terminada/Editando] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora