Capítulo#29

1.2K 112 51
                                    

Para mi total desánimo las clases comenzaron hoy dando por terminadas mis vacaciones de invierno.

El día transcurrió con lentitud y luego de más de cinco horas de conferencias que me dejaron sintiéndome peor que un chicle bajo la suela de un zapato finalmente sonó el timbre dando por terminada la última clase.

En estos momentos me encamino en dirección a la cafetería en compañía de Andy.

Al entrar diviso a Ben y Ann sentados en nuestra mesa habitual. Apresuro el paso y apenas llego me desplomo sobre una silla sin mucha elegancia. Andy llega unos segundos después sentándose a mi lado. 

Déjame adivinar.

Exclama Analisse divertida en respuesta a mi actitud.

Yo enarco una ceja esperando a que continúe.

Estás cansada porque tuviste que madrugar para llegar a tiempo y anoche te dormiste tarde haciendo cosas traviesas con cierto cannoli...

Mis ojos se abren como platos mientras chillo.

¡Ann!

Ella solo sonríe y me da un guiño.

Entonces escucho las carcajadas de Andy por lo que volteo a mirarlo justo cuando comienza a hablar.

Gracias por exteriorizar mis pensamientos Analisse.

Yo bufo molesta.

Oh Cállate.

Exclamo mientras le arrojo a la cabeza un puñado de papas fritas que tomé del plato de Ben .

El muy idiota solo sigue riendo.

¡Ria Reynolds!

Protesta entonces Ben mientras se acerca el plato al pecho en un gesto protector.

No toques mi comida.

Advierte de forma intimidante el pelirrojo mientras me fulmina con sus ojos miel.

Yo solo me encojo de hombros divertida.

¿Qué?
Necesitaba municiones y tu comida estaba en mi camino.

El achica sus ojos de forma amenazante.

Quieres morir.
¿Verdad?

Le doy una amplia sonrisa. 

Sabes que tengo una vena kamikaze.

Replico encogiéndome de hombros.

Evidentemente.

Habla Noelle a mis espaldas haciendo que de un respingo.

¡Oh por Dios!
¡¿Cuánto tiempo llevas ahí?!

Exclama Analisse llevándose una mano al corazón de forma dramática.

Noelle le da una sonrisa tranquila antes de contestar.

El tiempo suficiente para comprobar que yo soy la única adulta en este grupo.

Esta vez es Ann la que le lanza unas papas a Noelle haciendo que ella chille.

¿Ven? A eso me refiero.

Al mismo tiempo que Benjamín masculla un par de maldiciones y amenaza a quien vuelva a tocar su comida haciendo que todos estallemos en carcajadas.

Amore Italiano © [Terminada/Editando] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora