~One Shots E Imaginas De Anime

°Levi Ackerman° (3/3)

—Petra no era mi pareja.—

Levi aclaró sin vueltas el malentendido, esperando que ____ por fin entendiera que él no tenía a ninguna "chica especial".
Aquello tomó por sorpresa a la mujer, quien aún así se mantuvo tranquila.

—Pues para no ser nada suyo... Sufrió más su muerte que la de los otros.—

—Era un poco más cercano a ella que a los demás, sí... Pero no tenía interés amoroso alguno.—

—Vaya... Es raro escucharlo.—

—Ahora te toca a ti... Habla del mandíbula.—

—No tengo porqué hacerlo.—

—¿ah? Eso no es justo.—

—¿Justo de qué? Yo no acordé nada con usted.—

—No voy a matar a tu... Novio.—

—No es mi novio.—

—¿prometido entonces?—

____ revolvió su té ansiosa, por alguna razón le parecía muy peligrosa la conversación.

—Porco y yo... Hicimos un trato.—probó su bebida—. Si al llegar a los 24 años ninguno tenía pareja... Nos casaríamos.—

—Que estupidez...—

—¡oiga!—

Las mejillas levemente sonrojadas de la titán hicieron que Levi sonriera internamente.

Sigue viéndose adorable a pesar de los años y las circunstancias.

—Ni siquiera se querían entonces, era solo un tonto juego.—

—En eso se equivoca... Amé a Porco más que a nada en el mundo... Al menos hasta que llegué aquí.—aquello llamó la atención de Levi, quien la miró con curiosidad.

—¿por qué?—

La titan suspiró cansada.

—Porque aquí te conocí a ti, Ackerman... No te hagas el que no sabes.—

____ siguió disfrutando de su bebida tranquila, mientras que Levi intentaba asimilar lo que acababa de escuchar.

—Entonces tú... Me cambiaste por el mandíbula.—

—Se llama Porco... Y claro que no, no podría cambiarlo por usted. Él y yo éramos amigos pero teníamos un... Algo. Usted, capitán, nunca podría corresponder esto que yo siento... Y menos ahora que me ve como una traidora.—

A esas alturas los silencios incómodos ya estaban abundando bastante, pero Levi ya no tenía tiempo que perder mirando su taza.

—No es así, yo no tengo una mala imagen tuya... Y es desesperante ¿sabes?—____ lo miró confundida—. Eres quien aniquiló a mis hombres, quien ayudó a que perdiéramos la muralla María... Y tu falsa muerte... me arruinó por años.—dejó la taza en la mesa y se puso de pie en un segundo, la mujer lo imitó—. Debería odiarte... Pero no puedo ni quiero.—

—¿y qué quieres?—

—... Volver a como todo estaba antes.—____ negó levemente.

—Por más que me guste la idea de volver a tomar el té contigo, Levi... Hay que aceptar que eso ya no es posible, no podemos volver a ser amigos.—

—¿por qué no?—

—Porque... No.—

____ se alejó de Levi, mirando algo impaciente la cocina.

—Eso no es una respuesta.—

—¡acabo de decirte que estoy enamorada de ti y tú me pides volver a lo que éramos antes... No éramos nada!—

—Te equivocas.—

Levi volvió a acercarse a la mujer, sin saber que aquello la alborotaba demasiado. No sabía muy bien qué decirle, pero al menos tenía en claro que no quería tenerla lejos.

—Siempre he perdido a todas las personas cercanas a mi, ____... es por eso que intenté mantenerte lejos.—Levi dio un paso más hacia la mujer, notando sus ojos nerviosos sobre él—. Pero ese día... Cuando curaste las heridas de mis manos.—

—Te burlaste de mi por soplar tus cortadas...—el hombre sonrió al recordarlo.

—Te preocupaste por mi, por el dolor que estaba pasando... No solo el físico.—la miró—. No me dijiste nada... Pero lo entendiste, te mantuviste a mi lado y me acompañaste desde entonces... Nunca olvidaré eso.—

—... Siempre te vi rodeado de gente, pero solo de todas formas... Por eso te invitaba a tomar el té conmigo.—

Levi atrapó el rostro de la mujer entre sus manos, disfrutando del primer tacto real que mantenía con ella en años.

—Dices que no tenemos nada... Pero eso no es verdad.—acercó su rostro lentamente al de ella—. Durante todo este tiempo... Te he amado más que a nada.—

—... ¿por qué no me lo dijiste antes?—

—No creí que fuese necesario... No creí que te perdería.—

____ examinó su mirada, intentando confirmar que aquello era real.

—Entonces... ¿no me guardas rencor?—

Levi besó a la mujer de forma algo torpe, pues la falta de práctica lo limitaba un poco. No quería hacer el ridículo.

—... Dile al mandíbula que no cumplirás esa tonta promesa... Porque no pienso dejar que estés con ese puerco.—____ sonrió.

—Es Porco, no puerco...—atrapó sus mejillas, haciendo que el hombre suspirara—. ¿fue idea mía... O te molestó cuando mencioné lo de un prometido en el zepelín?—

—... ¿fue idea mía... O lo mencionaste para molestarme?—

—Puede ser...—

Levi sonrió al ser abrazado por la mujer.
Además de poseer el poder del titán hembra, la soldado de radiante sonrisa también tenía el poder de iluminar su vida. Y después de tantos años sumido en su propia oscuridad, volver a tenerla a su lado y poder haberle dicho lo que sentía, finalmente se sentía en paz.