~One Shots E Imaginas De Anime

°Inosuke Hashibira°

Dedicado a Sugar_Star_Sea

Anime: Demon Slayer

°•°

La tranquila mañana en la finca mariposa se vio interrumpida con los gritos estridentes de dos cazadores.

—¡¡TÓMATE LA MALDITA MEDICINA, CABEZA DE CERDO!!—

—¡¡¡OBLÍGAME!!!—

Zenitsu se tapaba asustado con su manta, pues estar en medio de las camas de Inosuke y ____ era lo más peligroso que le había pasado en la vida.

—Oigan, amigos. Cálmense un poco.—Tanjiro se alarmó en cuanto la chica se puso de pie.

La joven Aoi entró justo cuando la cazadora intentó cruzar por encima de la cama del rubio, viendo asustada como se desplomaba a los pies con un quejido de dolor. No llegó a acercarse a ella, cuando Inosuke ya estaba a su lado.

—¡____! ¿estás bien? ¿qué sucede?—

—Solo una punzada... ya... ya pasó.—

En cuanto la cazadora intentó levantarse, Inosuke se adelantó y la alzó en brazos. Con sumo cuidado volvió a acostarla.

—¿vas a tomarte la medicina ahora?—Inosuke refunfuñó un poco pero terminó obedeciendo a la chica, quien sonrió levemente—. Buen jabalí...—

Aoi veía sorprendida aquello, era obvio que ambos cazadores tenían una extraña relación.

°•°

—Se aman, eso es obvio.—

—¿¡tú crees!?—

Tanjiro y Rui miraban como el par de enamorados entrenaba a unos metros.

—Sí, puedo sentirlo. Cuando ambos están cerca, un aroma dulce emana de ambos. Además sus actos los delatan, se protegen a muerte.—Tanjiro soltó una risita—. Inosuke casi mata a Zenitsu cuando intentó abrazar a ____.—

—¿son pareja?—

—No, ninguno se atreve a admitirlo, pero no creo que haga falta.—

—¿¡qué dices!?—Aoi se puso de pie emocionada—. ¡deben decir lo que sienten!—sus ojos brillaron—. Y yo voy a encargarme de que eso suceda...—

Mientras observaba al par de cazadores entrenar, mil ideas llegaban a su mente de cómo unirlos.

°•°

La joven ayudante de la finca mariposa había reducido sus opciones a 3 infalibles planes.

1- Celos

2- Rumores

3- Intervención directa.

El tercero era su último recurso por si los anteriores fallaban, pero Aoi estaba segura de que no iba a necesitarlo.

—Bien... empecemos.—la azabache buscó con la mirada a cierto rubio, a quien vio descansando en el patio de la finca—. ¡Zenitsu!—

—¿sucede algo?—la miró confundido.

—No, nada importante. Solo... necesito que me ayudes con algo.—

Apenas le contó su plan, Zenitsu se negó de inmediato.

—¿¡quieres verme morir!?—gritó aterrado—. Si llego a siquiera mirarla, él va a arrancarme los ojos.—

—No seas exagerado...—