Cap 20

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Decía que... ¿iba a tener gemelos?

Miré a Matt, estaba igual de sorprendido que yo, tal vez se equivocaron de archivo, no es que no me guste, me alegra mucho, es decir, me emociona demasiado, pero no quiero ilusionarme.

Solo me hicieron una ecografía ginecóloga, no pudieron saber cuantos bebés tenía.

Matt leyó nuevamente como si no se la pudiera creer, me fije en mi nombre al principio del documento, tengo que asegurarme de que sea cierto, mañana después de salir de la universidad iré a el consultorio de la doctora Anderson, podría llamarla pero prefiero preguntarle en persona.

Me miraba las manos cabizbaja, no sé cómo va a reaccionar Matt y eso me tiene nerviosa, vio la pantalla unos segundos que me parecieron una eternidad, cerró el portátil rápidamente y acto seguido me tomó de la cara con ambas manos, lo miré a los ojos, eran preciosos de un color azul marino.

Estuvimos así por unos segundos, estaba demasiado cerca, tanto que si uno de los dos se movía chocarían nuestros labios.

Lo que hizo después me dejó sin palabras, si bien ya nos habíamos besado yo no recordaba nada, le seguí el beso pero después de unos segundos, se apartó lentamente.

- Yo... lo siento, no debí hacerlo fue un impul... - lo silencié besándolo nuevamente, subí a horcajadas de él, hizo el amago de quitarme el vestido que llevaba puesto, pero luego me di cuenta de lo que estaba haciendo, no puedo, no ahora, me dolió mucho lo que me hizo Sebastián, sé que Matt no es la misma persona pero no estoy lista, hace tiempo me prometí a mi misma no dejar que ningún hombre me hiciera daño, si bien fallé con mi padre y con la persona que decía amarme, no quiero que con Matt pase lo mismo.

Me separé de él bajándome de la cama, me fui con la excusa de que tenía que ir al baño, me bañé y cambié era un poco tarde, pero no me podía afectar mucho, cuando salí Matt ya estaba dormido.

Me senté en un sofá al lado de la cama, no podía dormir con él, no es que no quiera, me gustaría ir a terminar lo que dejé a medias, pero todo a su tiempo, no quiero apresurarme

Tomé una cobija de la cama, cuidando no despertarlo, cuando ya tenía la cobija en la mano a punto de irme, Matt levantó su mano derecha alcanzando la mía, no tenía signos de despertarse, es decir, ¿es sonámbulo?.

Con cuidado quité su mano y me eché al sofá, no era tan cómodo como la cama obviamente, pero se podía dormir aquí, eran las 3 de la madrugada y aún no lograba conciliar el sueño.

En resumen, no dormí nada pensando en el beso con Matt y la noticia de que ya no solo iba a tener un hijo, aún no puedo creerlo, pero saldré de dudas hoy en la tarde.

Me cambié temprano y me preparé el desayuno, ya que aún no llegaba nadie, la única que se queda en la casa es Martina, pero aún no se despierta y no quiero fastidiarla, subí a tomar mi celular que estaba en el sofá donde dormí.

- Kylie... hoy no dormiste aquí - señaló la cama.

- No quería incomodarte - me encogí de hombros.

- No me incómodas Kylie, si querías o quieres dormir sola, me lo hubieras dicho, no tienes porque dormir en ese sofá incómodo - busque mi celular y cuando lo encontré Matt me estaba mirando, esperaba mi respuesta.

- ¿Podría dormir en un cuarto de invitados? - pregunté y el asintió, me dijo que lo esperara para ir juntos a la universidad y se metió al baño.

Bajé para buscar algo que comer y encontré unos cupcakes que quedaron de ayer, a penas tomé desayuno y ya estoy comiendo otra vez, ¿Será malo para los bebés?, es decir, el que coma muy seguido.

Tres amores por accidente (El mejor Regalo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora