Cap 36

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- Thiago... - susurro y volteo la vista hacia otro lado ya que las nauseas me ganan.

Nerviosa y con lagrimas en los ojos busco mi celular por el piso, varias personas lo pisaron en el alboroto, no creo que sirva, una señora joven me ayuda a levantarme, me agarro la espalda adolorida y agradezco.

<Tengo que irme de aqui>

Recojo el celular con sumo cuidado, no puedo salir a la calle así nada más por lo que aprovecho que la mayoría está preocupada llamando a la policía, ambulancia o yo que sé, me escabullo en la parte de los empleados y para mi buena suerte en uno de los casilleros abiertos hay una chaqueta gris.

Me la coloco con todo y capucha, si me ven desde atrás no me reconocerían por el cabello, quiero creer que antes me reconocieron por Thiago o por mi panza.

Me limpio las lagrimas con el antebrazo y trato de cubrir mi vientre aunque es algo casi imposible con lo grande que está, salgo por la ventana trasera cuidando mi espalda, no veo muchas personas a mi alrededor y no se si eso es bueno o malo, trato de avanzar rápido al auto mientras hago como si estuviera hablando con alguien por teléfono.

Las llaves las tengo yo porque sino hubiera sido un gran problema, cuando llego al lugar donde dejamos el auto ya no está, es imposible estoy 100% segura de que lo dejé aqui.

Doy otra vuelta hasta que alguien me toma de los hombros delicadamente, me volteo y abrazo a Matt, lo sé por su aroma, es único.

Trato de no llorar, es algo que hasta el mismo Thiago sabia que podía pasar, pero eso no quita que duela, él me mira y toca el cabello anonadado.

- ¿Qué mierda te hiciste en el cabello? - mira a nuestro alrededor y luego vuelve su vista a mi.

- ¿Crees que eso importa ahora mismo?, ¿Dónde esta el auto? - caminamos rápido y nos subimos al auto.

<No se lo que voy a hacer, pero creo que es lo mejor>

Subimos y Martina corre a ayudarme con la herida que me hice en la espalda, Matt me mira molesto, no lo puedo culpar yo también estoy molesta conmigo misma.

- Gracias Martina - ella solo asiente y se va de la habitación.

- Matt... tenemos que hablar - esas palabras no traen nada bueno, su cara pasa de molestia a una expresión neutra.

- Por supuesto que tenemos que hablar, empezando porque hoy pusiste tu vida en riesgo sabiendo que te advertí que no salieras Kylie - dice serio.

- Sé que es mi culpa Matthew, todas las personas a mi alrededor salen heridas, de alguna u otra forma por mi culpa, no quiero que pase eso contigo así que por eso mismo es que... necesito que nos demos un tiempo - niega y se acerca lentamente hacia mi.

- ¿De que estas hablando? - me toma el rostro y quito sus manos aunque me duela mucho.

- Estoy hablando de porque te quiero y te amo mucho es mejor que cada uno siga por su lado, primero fue Liam, a mi padre lo mataron porque supuestamente no hice caso a las advertencias, luego mi mamá se intentó suicidar y hasta ahora no se porque, pero ella no haría eso - miro mis manos cabizbaja, no quiero llorar, no quiero que me vea vulnerable porque sino insistirá en que no me vaya.

- Becca que ya ni siquiera me habla luego Violet y ahora ultimo Thiago, no quiero en serio no quiero que te pase nada malo, ya mucho te hice con mandar a herir a tu hermana y... -

- Ni lo pienses Kylie, yo mismo te dije que no me importaba Violet, desde que llegaste la gran mayoría de mis días han sido felices a tu lado y no voy a permitir que por algo que tu crees que es verdad como que tienes la culpa de la enfermedad de tu prima, entiende que no todo es tu culpa - niego y me aparto trayendo una maleta del armario.

- Entiende de una maldita vez que no todo es tu culpa, son ellos que se meten en tu vida y te joden, ¿Crees que tu padre no se lo merecía?, como me contaste siempre fue un egoísta contigo ¿Y sigues sintiendo pena por él? - pregunta irritado.

- No siento pena por él, solo quiero hacerte ver lo grave que es está situación asi que por favor no hagas esto más difícil para ambos - digo en un tono apagado.

- Kylie ya te dije que no, no tienes a otro lugar donde ir - cierra la maleta y la vuelvo a abrir metiendo mi ropa.

- Alquilaré algún departamento pequeño o me quedaré en un hotel -

- ¿Qué acaso te volviste loca? - saca toda la ropa que había metido y suspiro - En todo caso el que se va soy yo, no necesito la seguridad de esta casa tu si, Martina te hará caso en todo, al fin y al cabo te quiere más a ti que a mi - asiento y bajo a la sala de estar.

Tal vez esto cambie muchas cosas a como nosotros habíamos planeado pero prefiero eso a ver sangre en el suelo otra vez, no se que pasará después de que mis hijos nazcan pero no me puedo adelantar faltan algunas semanas aun.

- ¿Enserio quieres hacer esto Kylie? - no.

- Creo que es lo mejor para los dos -

- Ok, hace un tiempo estuve buscando nombres, y la cita es pasado mañana asi que no se si iras sola o prefieres que te acompañe - pasado mañana nos dicen el sexo de los bebes y no estoy segura de si eso seria buena idea o no.

- Nos encontramos ahí - asiente y sale yéndose al garaje, escucho el sonido del auto cuando se va y es cuando ya no aguanto.

- Señorita no se ponga así - dice Martina tratando de calmar mi llanto pero no puedo, no con todo esto y lo que ha sucedido demasiado rápido para mi gusto - Eso le hace mal a los niños - se va y regresa en menos de un minuto con un vaso de agua y le echa algo que no se que es.

Lo tomo y supongo que se va a dejar el vaso en la cocina.

En menos de una hora mi vida se fue abajo, dije que no estaba lista para una relación y creo que en el fondo lo sabía pero no quería quedarme sola. No me merezco a Matthew ni a mis hijos, simplemente no los merezco, si mis hijos van a sufrir lo mismo que yo será mejor que se queden con Matt, sé que él los puede cuidar mejor que a su propia vida.

No estoy diciendo que los vaya a abandonar no seria capaz de hacerlo porque sé lo mucho que duele, pero tal vez y solo tal vez en unos meses pueda cambiar de opinión.

Paso todo lo que queda del día echada en la cama comiendo helado y viendo televisión, ¿Seria bueno buscar nombres?, aun no sé si serán niñas o niños o una niña y un niño asi que...

Al día siguiente Lisa me trae el desayuno y me informa que dos señoritas que contrató Matt renunciaron hoy, por mi esta bien, no necesito tener a tantas personas aquí.

Tomo desayuno y me llega un mensaje de la doctora Anderson recordando la cita de mañana en la mañana.

No pasa nada interesante en mi día solo lloré unas 4 horas seguidas, me bañé, comí, realicé mis deberes y me fui a dormir, la noche anterior me dormí rápido porque estuve llorando y me tomé una infusión caliente, pero ahora nada de eso funciona.

Estaba acostumbrada a dormir con Matt y que de un día para otro ya no esté aquí me afecta mucho, pero me repito que es lo mejor para los dos.

No se a que hora me dormí pero amanezco con ojeras las cuales intento cubrir con maquillaje pero no me queda un buen resultado.

Me pondré lentes, si, en pleno invierno pero ¿Qué puedo hacer?.

Tal vez luego contrate a un chófer porque me pueden poner una multa por manejar embarazada así que es mejor evitarla.

Llego al consultorio y Matt ya estaba ahí, dejo un espacio entre nosotros porque sino voy a lanzarme a sus brazos por lo mal que me siento, luego de un silencio incomodo entre los dos nos llama la doctora, ingresamos y hace lo mismo de siempre: las preguntas generales, ejercicios de respiración y a lo ultimo la ecografía o ultrasonido para revelar el sexo de los bebes.

No puedo evitar ilusionarme al ver a mis hijos de nuevo, creo que es algo que nunca dejará de pasar y por eso me gusta disfrutar el momento así sean pocos minutos.

- Felicitaciones es una niña - Matt da una leve sonrisa y yo no puedo estar más feliz - Y... es una niña y un niño felicidades.

Tres amores por accidente (El mejor Regalo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora