Tres amores por accidente (El mejor Regalo)

Cap 37

*Siete meses de embarazo*

Estaba nerviosa, cada semana la vivía con esa emoción pero a la vez miedo de cómo sería el parto.

Obviamente no es como yo hubiera querido que fuera este posible último mes de embarazo, me gustaría estar acompañada de las personas que amo, pero desafortunadamente no es así.

Ashton vino a visitarme hace dos días, solo estuvo 20 minutos aquí pero fueron suficientes para sentirme un poco mejor. Mamá también estuvo aquí con Amy, ella se disculpo por no estar aquí conmigo, pero a la siguiente semana siguió con su indiferencia.

Mi tercer año de universidad es este fin de semana y no sé qué hacer estoy muy nerviosa, vuelvo y repito me hubiera encantado pasarla feliz con mi familia, pero dada la situación creo que solamente irá Ashton y Joseph si es que no está trabajando.

Todos esperan la celebración de fin de año pero no creo que pueda ir, por un lado sé que si voy seré el centro de atención por el solo hecho de estar embarazada, también sé que irá Matthew y Becca, no se si ellos querrán estar ahí conmigo.

Por otro lado llevo más de una semana intentando conseguir un nuevo guardaespaldas o un nuevo chófer, pero al saber mi expediente nadie quiere el trabajo, todos se niegan al escuchar la historia de Thiago y eso me tiene algo preocupada, sé que no es lo que Matthew hubiera querido, pero no es que salga mucho de la casa sólo lo necesario.

Lisa llega a servirme el desayuno pero no como nada ya que no tengo hambre últimamente, la doctora dice que es normal por los síntomas de algún posible parto en estos días o semanas, de hecho me había sugerido que el parto fuera cesárea y no parto natural ya que puedo poner en riesgo mi vida y la de mis hijos. Por lo cual accedí de inmediato a que fuera cesárea.

Me alisto para ir a mi cita con la psicóloga, es la única forma en la que me he mantenido cuerda estos últimos días, no fui a su consultorio las semanas anteriores porque tenía miedo de que me hicieran algo.

Después de lo que pasó con thiago no he querido salir mucho, como mencioné antes sólo salgo lo necesario, es decir, a las citas con mi psicóloga y con la doctora Anderson.

Le cuento todo lo que me preocupa y ella está que no puede más, se va de la sala aturdida y en menos de 10 segundos entra Matthew.

¿Qué? Se supone que no debería estar aquí.

No dice nada y sólo me saca de la sala, me zafo de su agarre y me voy sin mirar atrás, me pongo los lentes negros como siempre antes de salir y me vuelve a tomar del brazo.

- Suéltame, por favor - hace caso omiso a mis palabras y me estampa un beso, me tardo un poco en apartarlo pero cuando lo hago salgo rápido de allí.

- Si vuelves a tocarme juro que voy a gritar -

- Escúchame Kylie -

- Me tengo que ir - subo al auto y me alejo de ese lugar, tengo el corazón latiéndome a mil no me imaginé que con un solo beso podía ponerme a temblar como lo hago ahora.

Tengo que frenar en un parque para poder respirar y calmarme, cuando llego a casa ¿Adivinen quien está ahí?

<Si, Matthew>

- Si es por la casa, espérame un momento ahora bajo mis cosas - hace una mueca y miro a otro lado menos a sus ojos, se lo que pasará si lo hago.

- ¿Crees que seria capaz de dejarte en la calle? - 

- No pero... Nada olvidalo, si no es por la casa ¿Qué haces aquí? - pregunto mirando mis uñas evitando verlo.

- La doctora Brown me dijo que estas ultimas semanas has estado deprimida y estresada -

- No se porque dijo tal cosa - miento, se supone que lo que yo le cuento se tiene que quedar allí.

- Contraté un chófer, se que no te gusta que hagan las cosas a tus espaldas, pero no puedes estar arriesgando tu vida y la de nuestros hijos por falta de personal - asiento y por el rabillo del ojo veo que se va acercando un poco.

- ¿Cómo abriste la puerta? - carraspeo y el deja de acercarse - Le quité el código ahora solo es por llave - sacudo las llaves en mi mano.

- Eso venia a discutir, Martina me avisó que... -

- Ponle el código si quieres, disculpa pero voy a cambiarme - subo las escaleras y me meto a la habitación, suelto el aire que no sabía que estaba reteniendo y cierro la puerta con seguro.

Suspiro y me quito la ropa para darme un baño, cuando estoy a punto de entrar a la bañera siento un fuerte dolor en la parte baja de mi espalda.

El cual hace que me sostenga del lavadero, la doctora dijo que podían darme estas contracciones días antes pero no sabia que serían tan fuerte como estas.

Siento otra punzada en mi vientre que me hace gritar, me las arreglo para avanzar hasta la cama y tomar una bata, ellos no tardan en tocar la puerta.

- ¿Señorita Kylie, esta bien? - escucho la voz de Lisa y Martina.

Trato de levantarme para abrir la puerta y escucho que Martina llama a Matthew, me pasa un poco el dolor y es cuando me permito caminar.

- Kylie - grita Matthew golpeando la puerta.

Siento que algo tibio resbala por mis muslos y es cuando entro en pánico, me apresuró a abrir la puerta y entra Matthew mirándome sorprendido.

- ¡Rápido llévela a la clínica, a roto fuente! - grita Martina desesperada buscando algo en el closet.

- Maldita sea - siento otra punzada en mi vientre y Matt me alza en brazos repitiendo cada dos segundos que me tranquilice.

Me sube al auto y no tarda ni un minuto en estar fuera de la casa.

- Relajate ¿Ok? -

- ¡Estoy relajada solo llévame rápido a la clínica! - grito y de mis ojos salen pequeñas lágrimas de dolor.

Las contracciones se detienen por 5 minutos y me vuelven a atacar con más fuerza, hago los ejercicios de respiración que me enseñó la doctora pero al no ver resultados bajo la ventana para que me llegue el aire a la cara, a lo lejos veo la entrada a la clínica.

<Al fin>

Matthew baja y vuelve a alzarme, a penas entramos dos enfermeras traen una silla de ruedas.

- Siéntese aquí por favor - hago lo que me indican y me llevan a un cuarto.

No me sorprende lo rápido que me atendieron ya que la doctora Anderson avisó que podía estar en labor de parto en estas semanas.

Matthew entra conmigo y me hacen ponerme una bata, por un momento siento desmayar pero otra contracción me hace torcerme de dolor.

- Respira - me dice una enfermera y la miró mal, al parecer no se da cuenta y vuelve a decir - Respira otra vez -

- ¡Eso hago, tengo que respirar o sino me muero! - grito histérica.

- Ok, Kylie escucha, dijimos que el parto sería por cesárea, solo tienes que tranquilizarte, haz los ejercicios de respiración que prácticamos - pregunta la doctora y asiento.

- Disculpe pero tendrá que retirarse -

Me inyectan algo en el brazo y lo último que veo es a Matthew saliendo de la sala.

...

Antes que todo sé que dije que iba a actualizar el sábado pero se me borró el capítulo y tuve que volver a escribirlo, así que puede que se encuentren varias faltas ortografícas sin corregir porque quiero subirlo lo más pronto posible.

No prometo nada, pero puede que veamos el punto de vista de Matthew en el siguiente capitulo. Ahora si, esto se pone interesante jsjsjs.

Nos vemos mañana en el capítulo 38.

Besos, byee.