En un mundo donde la soledad y la tristeza habían tejido las sombras que cubrían la vida de una mujer, la llegada de una luz inesperada supuso un cambio profundo en su existencia. Había aceptado resignadamente que la eternidad sería su compañera, un...
En una zona inhóspita y desolada del mundo o alguna dimensión, yasian los restos de unos escombros de lo que antes fue conciderado un refugio para hombres... El cielo humeante de tono negro lloraba la trágica tragedia que había ocurrido mientras que la tierra ardía con intensas flamas matando toda vida vegetal de la zona... Los truenos rugian acompañando el escenario lamentable en donde no se veía vida alguna, solo caos y destrucción.
No fue hasta que en medio de los escombros del lugar se alzó una mano demostrando que efectivamente había un sobreviviente del trágico escenario presente... Lentamente la mano comenzó a alzarse moviendo escombros de su alrededor donde primero salió el brazo por completo demostrado ser uno masculino por la mosculatura y grosor de este hasta por fin alzarse por completo todo el cuerpo... De los escombros emergió un hombre de cabellera roja levemente encrispado y puntiagudo, además de que presentaba ojos verdes afiliados con sus pupilas rasgadas.
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Este hombre no aparentaba más de 25 años y mostraba un físico que fácilmente podría cautivar la atención de más de una del miembro femenino de su especie y de otras más... Lamentablemente su condición actualmente no era la mejor ya que de su frente caía un hilo de sangre y en sus brazos y cuerpo se presentaban algunos rasguños.
Una vez erguido por completo, el pelirrojo observó el panorama frente a sus ojos con una expresión muerta sin temer lo que veía pues técnicamente todo había sido su culpa, sin olvidar que también la de ese "pequeño monstruo".
- ¡Ahora si creo que la cague! Se dijo a sí mismo el pelirrojo mejor conocido como Gran Rojo, el cual veía con lástima lo que antes fue su refugio para huir de los problemas del Mundo Sobrenatural, convertido en más que escombros y todo se debía a una personita en especifico.
- ¡Ophis me va a matar! Pensó Rojo con lamento recordando como había llegado a esta situación pero más que nada como había cometido la peor estupidez en el Mundo.
. . .
- Minutos antes del desastre -
Oscuridad, eso era lo que veía cierta persona mientras escuchaba poco a poco una grave voz aparentemente llamándolo, más no sabía que pasaba pues sus sentidos aún no estaban agudizados por el estado en el que se encontraba.
- ¡Is! -
- ¡Iss! -
- ¡Issei! -
Era la constante voz gruesa que llamaba a cierto castaño muy querido por muchos, el cual yasia tranquilamente dormido aunque eso fue por unos segundos antes de comenzar a despertar por los constantes llamados a su persona... Un poco adormilado él comenzó a abrir sus ojos esperando a que su vista se acostumbrara a la luz del "dia" pero sentía que algo no andaba bien por dos simples razones, su almoha y cobija.
